El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a su llegada a Jordania este lunes por la noche. A su izquierda, el embajador de España en el país árabe Miguel de Lucas González.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a su llegada a Jordania este lunes por la noche. A su izquierda, el embajador de España en el país árabe Miguel de Lucas González. Moncloa

Política POLÍTICA EXTERIOR

Sánchez compensará su apoyo a Palestina pidiendo a Arabia Saudí que reconozca a Israel

El presidente del Gobierno inicia una gira por Jordania, Arabia Saudí y Catar para buscar una solución a la guerra en Gaza.

2 abril, 2024 02:44
Diego Rodríguez Veiga Alfonso Muñoz Fernández

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pedirá al príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed bin Salmán, que su país reconozca al Estado de Israel para poder avanzar hacia la solución de la guerra en Gaza. Lo hará este miércoles en su reunión con el mandatario árabe, en el contexto de una gira por Oriente Próximo que coincide con la escalada de Benjamín Netanyahu contra Irán.

Según trasladan desde Moncloa, esta petición va en línea con la solución de los dos Estados que España plantea. Si bien el foco se suele poner en la necesidad de reconocer al Estado palestino, la solución también consistiría en que los países árabes de la zona reconozcan a Israel. De esta forma, Sánchez compensa también su apoyo decidido al Estado palestino. 

Arabia Saudí es uno de los 28 Estados miembros de Naciones Unidas que no reconoce a Israel. En septiembre del año pasado, Bin Salmán abrió la posibilidad del reconocimiento, mostrando continuidad con los acuerdos de Abraham. Esto fue calificado por Irán como "una puñalada por la espalda al pueblo palestino y a la resistencia palestina".

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Si Arabia Saudí reconoce a Israel, ese hecho provocaría el acercamiento de dos socios de Estados Unidos en la zona frente a Irán, lo que supondría una alteración de los equilibrios ya de por sí frágiles. Varios expertos consideran que el anuncio del acercamiento propició la activación de Hamás y los actos terroristas que desencadenaron el conflicto actual.

El anuncio de Moncloa coincide con un ataque de Israel, este lunes, en el que ocho personas murieron en un bombardeo sobre el consulado iraní en Damasco. Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, el ataque es obra de Israel. El Gobierno de Netanyahu, sin embargo, aún no ha reconocido la acción.

Las autoridades iraníes han anunciado que responderán con "dureza" a Israel por el ataque, en el que han muerto dos generales de la Guardia Revolucionaria iraní. "El régimen sionista (Israel) actúa contra las leyes internacionales, por lo que recibirá una dura respuesta por parte nuestra", aseguró Hossein Akbari, el embajador iraní en Siria.

Además, la semana pasada 46 soldados de las fuerzas gubernamentales sirias y del grupo libanés Hizbulá murieron en la madrugada del viernes en Alepo, tras varios ataques aéreos que el Gobierno de Damasco también atribuyó a Israel.

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Desde el Gobierno español, sin embargo, insisten en que la solución de los dos Estados es la única posible para poner fin a un conflicto que lleva décadas desatado. Sánchez, además, lleva tiempo buscando desempeñar un papel predominante en un hipotético proceso de paz.

El presidente del Gobierno aterrizó este lunes por la noche en Jordania, en su primera parada de la gira, y este martes se reunirá con el rey Abdalá II de Jordania, tras visitar un campo de refugiados. El país es el que más refugiados palestinos está recibiendo.

El miércoles, Sánchez volará a Arabia Saudí, donde se verá con Bin Salmán. Desde Moncloa destacan que el príncipe heredero, que ejerce la labor ejecutiva en el país, recibirá al presidente del Gobierno en su comida tras romper el ayuno del Ramadán, un gesto de absoluto respeto en estos países.

Por último, Sánchez visitará el jueves Catar, donde será entrevistado en la cadena Al Jazeera, la principal del mundo árabe. Después, será recibido por Abdulrahman bin Jassim Al Thani, ministro de Exteriores del país.

Palestina y Telefónica

Según explican desde Moncloa, el objetivo de la visita de Sánchez tiene dos vertientes, la política y la económica. Fuentes gubernamentales aseguran que el presidente del Gobierno tiene interés por conocer las reflexiones de esos países sobre el conflicto en Gaza y poner España a disposición de lo que pueda necesitarse para solucionar la situación.

Desde Moncloa insisten en que no se trata sólo de parar la actual guerra, sino también de construir el "día de después" del conflicto. Es decir, buscar que la Autoridad Nacional Palestina tenga capacidad para desarrollar las labores de un Ejecutivo de un Estado soberano y que los balances en Oriente Próximo eviten nuevas situaciones de guerra.

A pesar de que los países que va a visitar, esencialmente Arabia Saudí y Catar, tienen muchas cuentas pendientes en materia de Derechos Humanos, desde el Gobierno cuentan que Sánchez no se va a centrar en esos debates. Consideran que hay vías, como las mantenidas a través de la Unión Europea, para presionar a ambos países a respetar los Derechos Humanos, pero que el objetivo de Sánchez es otro.

Sánchez también se reunirá con empresarios españoles en Arabia Saudí y Catar para intentar impulsar los proyectos españoles en dichos territorios, así como las inversiones de ambos países en España. Los dos están en una fase de modernización económica para que sus cuentas no dependan exclusivamente del petróleo (Arabia Saudí) y del gas (Catar).

La entrada de la operadora de telecomunicaciones saudí Stc en el accionariado de Telefónica tampoco es un tema que esté en la agenda del viaje de Pedro Sánchez a Arabia Saudí. No obstante, fuentes gubernamentales han señalado que, en el caso de que este asunto surja durante la visita al país árabe, el presidente está preparado para tratarlo.

Stc anunció el pasado mes de septiembre la compra de un 9,9% de Telefónica por 2.100 millones de euros. Una participación que se compone de un 4,9% en acciones y de un 5% en instrumentos financieros que necesitan de la autorización del Gobierno para su conversión en títulos con derecho a voto.

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En este sentido, han recordado que la posición del Gobierno español es conocida y no hay nada nuevo al respecto. En ella se enmarca su decisión de hacerse con una participación de hasta un 10% del capital de Telefónica. De hecho, han recordado que la semana pasada la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) anunció que había adquirido ya más de un 3% de la operadora.

Además, han añadido que el Gobierno no informa públicamente cuando una empresa solicita autorización para una inversión en una empresa española y únicamente informa cuando ésta es aprobada. No obstante, han incidido en que el papel de Stc en Telefónica no es una cuestión prioritaria de este viaje y han confirmado que tampoco hay previsto ningún encuentro con directivos de la operadora de telecomunicaciones saudí.