Sánchez intenta convencer a Puigdemont de que se fíe de él para no cubrir todo el terrorismo con la amnistía

Desde Bruselas, Sánchez apeló este jueves a su palabra como fuente de autoridad y se mostró tajante al afirmar: "Con este proyecto de ley, estoy convencido, y así al final lo van a concluir los tribunales, de que van a estar todos los independentistas catalanes amnistiados, porque no son terroristas".

Y recalcó, para contentar a Puigdemont y al separatismo en general: "Como todo el mundo sabe, el independentismo catalán no es terrorismo, no lo es".

[Pedro Sánchez: "Todos los independentistas catalanes serán amnistiados porque no son terroristas"]

El presidente se anticipa así a las resoluciones judiciales y contradice el criterio tanto de la Fiscalía de la Audiencia Nacional (que pide hasta 27 años de cárcel por terrorismo a los CDR que fabricaban explosivos para atentar contra infraestructuras) como del juez Manuel García-Castellón, que sitúa a Carles Puigdemont como el máximo responsable del Tsunami Democràtic, organización a la que investiga por presuntos delitos de terrorismo.

El PP interpreta las palabras de Sánchez como una nueva intromisión del Gobierno en la labor de jueces y fiscales. Después de que los principales socios del Gobierno utilizaran el debate de la ley de amnistía para acusar de "prevaricación" a los jueces que instruyen causas contra los independentistas, señalan fuentes populares, el presidente intenta ahora marcar el paso a los jueces, para dictarles qué es "terrorismo" y qué no.

"Lamento tener que recordar que el presidente del Gobierno ni pone ni quita etiquetas de terroristas. Eso le corresponde a la Justicia", ha indicado el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, en la red social X. Y ha puntualizado: "Si no existe ese delito, no se explica para qué quieren amnistiarlo".

Feijóo alude así a la enmienda que el PSOE introdujo en el texto, durante su tramitación en la Comisión de Justicia, por la que quedarán amnistiados todos los delitos de terrorismo, "siempre y cuando, de forma manifiesta y con intención directa", no "hayan causado violaciones graves de derechos humanos".

En cualquier caso, Pedro Sánchez aludió expresamente al delito de "terrorismo" para descartarlo en las causas abiertas a los independentistas, pero ha evitado mencionar las conexiones de Puigdemont con agentes de Putin, una cuestión especialmente sensible en estos momentos para las instituciones europeas.

Respuesta del separatismo

Tanto el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, como el secretario general de Junts, Jordi Turull, celebraron este jueves las palabras pronunciadas por Sánchez en Bruselas.

Turull coincidió con el presidente del Gobierno al sentenciar que en el procés "no ha habido ningún caso de terrorismo" y, por tanto, "todos los independentistas tienen que ser amnistiados".

Pero para garantizar que sea así, añadió el número dos de Carles Puigdemont, PSOE y Junts tienen que seguir retocando el texto durante su tramitación en la Comisión de Justicia, para "blindarla" frente a la acción de los jueces.

Por su parte, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, aplaudió las palabras de Sánchez desde Bruselas y recalcó: "Los independentistas no somos delincuentes".

En consecuencia, Aragonès pidió no poner en riesgo la tramitación de la ley de amnistía y aprobarla lo antes posible, en una alusión al voto de los siete diputados de Junts que el martes tumbaron la norma y la devolvieron a la Comisión de Justicia.

Pero en Bruselas, Sánchez recurrió a un segundo argumento para tratar de convencer a Puigdemont de que no tenga la tentación de poner fin a la legislatura por falta de acuerdo sobre la ley de amnistía.

Si hay nuevas elecciones, dejó caer Sánchez, la alternativa al actual Gobierno es otro formado por PP y Vox, cuyas "soluciones" para Cataluña son "para echarse a temblar": "ilegalizar" a los partidos independentistas, "encarcelar" a sus líderes e "imponer un 155 permanente". Es decir, Cataluña perdería su autogobierno y se esfumaría cualquier posibilidad de que Puigdemont pueda regresar a España.