El PP alega "limitaciones de agenda" para reducir la presencia de Ayuso en la campaña de Castilla y León

Ayuso participará en un acto con Alfonso Fernández Mañueco el próximo 4 de febrero en Burgos, y también mantendrá un encuentro con militantes y simpatizantes del partido en Segovia.

Igualmente estará presente -aunque no está previsto que tome la palabra- en el acto de cierre de campaña, el 11 de febrero, junto al resto de presidentes autonómicos y barones regionales del PP.

A lo largo de la campaña electoral también visitarán Castilla y León los expresidentes José María Aznar (este sábado en Valladolid) y Mariano Rajoy (el día 10 en León) y el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almedia, que estará en Segovia el 2 de febrero junto al candidato Fernández Mañueco.

Sin "directrices" de Génova

Fuentes del Gobierno regional de Madrid han recordado que Ayuso se puso a disposición de PP, para apoyar a Mañueco en todos los actos de campaña que considerase necesario.

De hecho, el equipo de Ayuso ha recibido numerosas peticiones de las distintas organizaciones provinciales del PP de Castilla y León que requieren su presencia en los actos previstos hasta la jornada de reflexión.

Sin embargo, el comité de campaña del PP de Castilla y León ha preferido no dar a Ayuso mayor relevancia que al resto de barones del partido -pese a que su tirón electoral y la atención mediática que concita son evidentes- y ha fijado un criterio único: cada presidente autonómico acudirá a un solo acto junto a Fernández Mañueco, para escenificar luego la unidad del partido con la presencia de todos ellos en el acto de cierre de campaña.

Fuentes del PP de Castilla y León consultadas por EL ESPAÑOL recalcan que no se ha recibido "ninguna directriz" de la sede nacional de la calle Génova para fijar este criterio y alegan las "limitaciones del calendario" para explicar la reducida presencia de Ayuso.

"No nos han llamado más"

"Además de la presencia continuada de Pablo Casado, vamos a tener a los expresidentes Aznar y Rajoy, a otras figuras nacionales y a los principales vicesecretarios del partido, y sólo tenemos 14 días de campaña", explican dichas fuentes.

Desde el gobierno regional de Madrid, comentan con cierta resignación que se haya limitado la presencia de Ayuso en la campaña electoral: "No nos han llamado más que para eso. Si les convencen más otros perfiles, estupendo". El acto de Segovia al que acudirá la presidenta madrileña se celebrará sin Alfonso Fernández Mañueco, fuera de la agenda oficial, como un encuentro con simpatizantes del partido.

El desembarco de barones regionales se ha iniciado este viernes en Salamanca, con un acto protagonizado por el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, junto a Fernández Mañueco.

El protagonista de la jornada del sábado será el expresidente José María Aznar, quien clausurará el mitin de Fernández Mañueco en la Cúpula del Milenio de Valladolid. Por su parte, el líder nacional del PP, Pablo Casado, protagonizará el principal acto del domingo en Ávila.

Los barones regionales

El desfile de figuras nacionales continuará la próxima semana. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, acompañará al candidato a la presidenta de la Junta el martes 2 en Segovia, y el sábado 5 lo hará el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo, en Zamora.

La visita del presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras, está pendiente de cerrar la agenda, mientras que el acto del expresidente Mariano Rajoy se ha cerrado para el día 10 en León.

También acudirán a la región el secretario general del PP, Teodoro García Egea (el lunes 7 estará en Soria junto a Fernández Mañueco) y los principales vicesecretarios del partido. El equipo de campaña ha programado además encuentros con consejeros de Hacienda (el día 7 en Segovia) y Sanidad (el día 8 en Aranda de Duero) de los distintos gobiernos regionales del PP, en dos actos sectoriales que servirán de escaparate de la gestión del partido.

Alfonso Fernández Mañueco ya estuvo arropado por los otros cuatro presidentes autonómicos del PP el pasado día 15 de enero, durante el Congreso regional del PP de Castilla y León.

El testigo del 4-M

En aquel acto, Isabel Díaz Ayuso animó a Fernández Mañueco y al presidente nacional del PP, Pablo Casado, a recoger el testigo de las elecciones del 4-M para demostrar que "la pesadilla de Pedro Sánchez tiene fecha de caducidad".

"Estas elecciones", dijo en alusión a los comicios del 13-F en Castilla y León, "son un faro de luz y libertad para toda España", ha afirmado dirigiéndose a Fernández Mañueco, "España necesita que Castilla y León demuestre que el proyecto de Pedro Sánchez está acabado y que el 4-M no fue una anécdota".

Efectivamente, el PP no concibe la cita electoral del 13 de enero como unos simples comicios autonómicos, sino como una estación decisiva en el camino de Pablo Casado hasta La Moncloa. 

En la carrera hasta el 13-J, Fernández Mañueco debe salvar dos obstáculos: la ofensiva de Vox (que aspira a obtener una representación decisiva para poder exigir su entrada en el Gobierno regional) y la fragmentación del voto provocada por las distintas candidaturas localistas y de la España Vaciada (que finalmente pueden arrebatar más escaños al PSOE).

Guerra a Vox

Para contrarrestar ambas amenazas, el PP ha diseñado una campaña muy pegada al medio rural, utilizando como argumento las declaraciones en las que el ministro de Consumo, Alberto Garzón, afirmó ante el diario The Guardian que en España hay "macrogranjas" en las que se maltrata a los animales y que exportan "carne de mala calidad".

En el acto de apertura de campaña, celebrado el jueves en La Bañeza (León), el presidente nacional del PP, Pablo Casado, puso distancia de nuevo frente a Vox y recalcó que cualquier voto que no vaya al PP sólo servirá para reforzar a los socialistas: "O Mañueco o Sánchez. No hay alternativa porque los demás son todos aliados de Sánchez", afirmó.