El rey emérito Juan Carlos I.

El rey emérito Juan Carlos I. Gtres

España

El rey emérito Juan Carlos I publica sus memorias: "Los reyes no se confiesan", pero "me roban mi historia"

La editorial Planeta se ocupará del lanzamiento, que se producirá a finales de 2025. Lee un fragmento del libro, que llevará como título 'Reconciliación'.

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J. Cedillo
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Tras un largo silencio que se remonta a la antesala de los últimos escándalos –donaciones a Corinna, presuntas mordidas por negocios en países árabes...–, el rey emérito ha decidido contar su historia.

Después de casi cuarenta años de reinado, Juan Carlos I sale al paso de tanta información publicada desde su exilio en Abu Dabi, consciente de que los "propios errores han acabado por ensombrecer su trayectoria", tal y como anuncia la editorial en un comunicado. Reconciliación, el título de sus memorias, viene "a reparar esa situación", aseguran desde Planeta, el sello encargado de su lanzamiento, que tendrá lugar a finales de año.

Amén de "sus aportaciones fundamentales al éxito de la democracia española", esta obra es, según la editorial, "un acontecimiento histórico". Escrita en primera persona, "relata en detalle la parte privada de una vida pública".

"Son unas memorias ricas en anécdotas que no eluden los episodios más significativos de nuestra historia reciente, pero tampoco las alegrías ni los malos momentos de su vida íntima y personal", reza el comunicado de Planeta, que considera que la obra está "escrita a corazón abierto y sin concesiones".

El recorrido empieza en "un país inmerso en una guerra cainita" y con un joven Juan Carlos sujeto a "un destino que no le pertenece". Sin embargo, "paso a paso, eludiendo mil complots y ganándose la confianza de unos y otros, acaba convirtiéndose en el actor principal de la transformación radical de España en el estado moderno y próspero que es hoy", aseguran desde la editorial.

Reconciliación navega entre los dos exilios que marcan el principio y final de su vida —el obligado, en Estoril, y el voluntario, en Abu Dabi— y por ella transitan muchos de los protagonistas más destacados de la historia contemporánea. "No tengo derecho a llorar", dice el monarca. "Pero tiene derecho a buscar su anhelada reconciliación con el país que tanto ama y añora", apostilla la editorial en su comunicado.

Planeta ha tenido a bien incluir un párrafo contenido en su autobiografía: "Mi padre siempre me aconsejó que no escribiera mis memorias. Los reyes no se confiesan. Y menos, públicamente. Sus secretos permanecen sepultados en la penumbra de los palacios. ¿Por qué le desobedezco hoy? ¿Por qué he cambiado de opinión? Porque siento que me roban mi historia".

Esa historia tiene, desde luego, mucha enjundia. Elegido por el dictador Francisco Franco para que liderara España tras su muerte, en 1975 Juan Carlos I apostó decididamente por una democracia parlamentaria en nuestro país. Cuando el 23 de febrero de 1981 fue puesta en riesgo por unos militares rebeldes, compareció públicamente en una retransmisión histórica para ordenar el fin del golpe de Estado.

Su popularidad creció desde entonces y se prolongó durante décadas. El mítico "¿Por qué no te callas?" que le espetó al expresidente venezolano Hugo Chaves en una Cumbre Iberoamericana de 2007, en Santiago de Chile, consolidó su imagen.

Sin embargo, la corrupción empezó a acorralarlo al principio de la segunda década de este siglo. El caso Nóos, que implicaba a su entonces yerno, Iñaki Urdangarín, precipitó su abdicación en 2014, pero resultó ser poco más que la punta del iceberg.

Tras dejar el trono a su hijo, Felipe VI, los escándalos señalaban directamente al rey emérito. Las donaciones a la empresaria alemana Corinna Larsen, los presuntos amaños en las obras del AVE La Meca-Medina y la filtración de las conversaciones con la exvedette Bárbara Rey han sido algunas de las controversias más sonadas de los últimos años. 

Juan Carlos I ha aparecido recientemente en los medios de comunicación debido a la denuncia que él mismo interpuso contra el expresidente cántabro Miguel Ángel Revilla por injurias y calumnias.