Sólo 7.771 mujeres ya agredidas podrán ser avisadas si sus nuevas parejas son reincidentes

El departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska ha pedido que se focalicen los esfuerzos policiales en proteger a estas mujeres y alertarlas del potencial riesgo en el que se encuentran. Todas ellas figuran en el sistema VioGén, la aplicación de seguimiento integral de los casos de violencia de género.

Además de tener en cuenta esta variable, Interior pretende controlar en los próximos meses los movimientos de los 61.000 agresores sexuales más peligrosos de España, con el fin de alertar a sus parejas de su historial delictivo en la materia.

Todos ellos figuran también en la herramienta para monitorizar todos los casos. La tarea, encomendada a Policía Nacional y Guardia Civil, se pondrá en marcha este mismo viernes, en cuanto se active la instrucción. Interior tiene fichados en el sistema de vigilancia VioGén a un total de 655.571 agresores. El 90% de ellos han sido denunciados por una sola víctima.

En cambio, hay un 9,3% del total, 61.079 hombres, que tienen el perfil de "agresor persistente", que son aquellos en los que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado centrarán el foco.

Interior ha tenido en cuenta esos dos argumentos y por eso "el perfil del agresor" será también un factor determinante a la hora de advertir a la pareja que denuncia haber sido agredida.

Niveles de riesgo

Un informe redactado en enero por la fiscal de Sala de Violencia sobre la Mujer ponía en duda que esta medida, que Fernando Grande-Marlaska anunció en diciembre, pudiera ser adoptada de manera "automática y generalizada".

Con la nueva instrucción, avalada por la Fiscalía General y la Abogacía del Estado, se analizará caso por caso. De los 61.079 agresores reincidentes registrados en VioGén, hay 51.092 a los que se les atribuyen dos víctimas, 7.832 figuran con tres víctimas, y 2.155 tienen más de tres.

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Los policías y guardias civiles solo podrán informar de antecedentes relacionados con la violencia de género cuando el riesgo de la víctima se sitúe en la escala media, alta o extrema, y siempre que su agresor haya sido denunciado en los cinco años anteriores.

Las mujeres víctimas de violencia de género son incluidas en el nivel de riesgo bajo, medio, alto y extremo en base a una serie de factores que van desde la reincidencia dle agresor, la gravedad de la violencia que se ha ejercido contra ella, el apoyo que tiene o no de su familia y su entorno, la retirada de las denuncias o si se reaunda la convivencia, entre otros factores.

Con estas circunstancias sobre la mesa, si el riesgo es "bajo", los agentes se ponen en contacto con la víctima y evalúan el caso a los 60 días. Cuando el riesgo es "medio", la frecuencia de las llamadas de control a la víctima se incrementan. La valoración del riesgo se hace cada menos tiempo, en este caso cada mes. A este nivel llegaría la medida de las contravigilancias en la casa de la víctima o en el colegio de sus hijos.

El riesgo alto contempla estas medidas mucho más agravadas, llegando los agentes a acompañarla si tiene que ir al juzgado o en cualquier otro momento si lo necesita. Los agentes incluyen a una mujer en riesgo extremo cuando existe la posibilidad inminente de que sea agredida a manos de su pareja.

Datos preocupantes

Hasta el momento, en lo que va de 2023, 8 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas. Diciembre de 2022 fue el peor de toda la serie histórica: fue el mes con mayor número de mujeres asesinadas y en el que más víctimas habían denunciado previamente a quienes acabaron con su vida.

En todo el año pasado, 18 de las 49 mujeres asesinadas denunciaron formalmente a sus parejas, y aun así Interior no logró evitar el crimen. Es un dato que preocupa en Interior.

EL ESPAÑOL reveló en exclusiva que desde 2007 han sido asesinadas 171 mujeres pese a haber interpuesto denuncia en su día y estar incluidas en el plan de protección VioGén. Es esto lo que Marlaska pretende erradicar. 

Los agentes encargados de elaborar la valoración del riesgo deberán examinar cada caso concreto y evaluar diversos aspectos, entre ellos el grado de riesgo que los antecedentes del agresor suponen para su actual pareja o la necesidad de que ésta y su entorno los conozcan para mejorar su percepción del peligro que corren.

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Por lo que a los antecedentes se refiere, los agentes policiales tendrán que excluir de esta valoración aquellos hechos prescritos o sobre los que conste en el Sistema VioGén la existencia de una sentencia absolutoria o de sobreseimiento libre del procedimiento judicial.

Los colectivos policiales consultados inciden en que si se quiere luchar de forma exitosa contra esta lacra resulta crucial reforzar las Unidades de Atención a la Familia y la Mujer (UFAM).

Según los datos conocidos por EL ESPAÑOL, estas unidades soportan una gran sobrecarga de trabajo en todas las provincias del país. Las UFAM se encargan en la actualidad de atender a casi 37.000 víctimas en sus diferentes tipos de riesgo, además de a casi 9.000 niños incluidos en el sistema. 

El problema reside en que, en la mayoría de las 50 provincias españolas, las UFAM han perdido agentes o tienen la misma plantilla que hace una década. Así lo refleja un informe elaborado por el Sindicato Unificado de Policía (SUP) este mismo año. Por tanto, si Interior pretende llevar a cabo una lucha eficaz contra esta lacra necesitaría, a juicio de los profesionales, aumentar sensiblemente las plantillas.