El exministro Francisco Álvarez-Cascos, en octubre de 2018, antes de declarar en la comisión de investigación sobre la financiación del PP en el Congreso de los Diputados.

El exministro Francisco Álvarez-Cascos, en octubre de 2018, antes de declarar en la comisión de investigación sobre la financiación del PP en el Congreso de los Diputados. Europa Press

España INVESTIGACIÓN

Así controlaba Cascos la empresa de arte de su mujer que facturaba a las contratistas de Fomento

Los documentos que en poder de Anticorrupción acreditan que el exministro de Fomento gestionaba la empresa de compraventa de arte de María Porto.

23 enero, 2023 02:13
M.A. Ruiz Coll Javier Corbacho

La documentación que ya tiene en su poder la Fiscalía Anticorrupción acredita que el exministro Francisco Álvarez-Cascos también controlaba la empresa de compraventa de obras de arte creada por su entonces pareja, María Porto. La compañía facturó a las grandes constructoras que habían recibido adjudicaciones públicas durante su etapa como titular de Fomento.

Porto constituyó la sociedad Aqualium Spain SL (junto a una socia minoritaria que tenía una única acción) en febrero de 2004, justo dos meses antes de que Cascos cesara como ministro del Gobierno de Aznar. Además de los pagos de las constructoras, tal y como ha desvelado EL ESPAÑOL, esta sociedad recibió entre 2015 y 2018 una asignación mensual de 6.050 euros al mes de la siderúrgica asturiana Duro Felguera, que ya ha anunciado la apertura de una investigación propia.

Facturas, extractos bancarios y comunicaciones internas de Aqualium Span SL ocupan diez cajas depositadas recientemente ante la Fiscalía Anticorrupción.

[Cascos cobró 6.050 € al mes de Duro Felguera durante 4 años con la empresa de venta de arte de su mujer]

Entre estos documentos, se encuentra el escrito que un gestor externo envió a Álvarez-Cascos el 11 de junio de 2004, en el que le facilitaba toda la documentación necesaria (nóminas, finiquito, certificado de liquidación y certificado de empresa) para tramitar el despido de una empleada de Aqualium.

La carta está encabezada con un "estimado Francisco". No está dirigida a María Porto, quien, sobre el papel, figuraba como administradora y accionista de la empresa, sino al exministro, lo que demuestra que participaba activamente en la gestión de la sociedad.

Lo mismo ocurre cinco meses después: el consultor se dirige el 23 de noviembre de 2004 a Francisco Álvarez-Cascos y no a María Porto para solicitarle diversa documentación de Aqualium "a efectos de seguir actualizando la contabilidad de la sociedad".

Entre otros documentos, el gestor pide al exministro copia de los extractos bancarios de dos cuentas de Aqualium, las facturas de los gastos de telefonía, los justificantes de los gastos efectuados con la tarjeta de crédito de la empresa, la factura por el pago a uno de los artistas y aclaraciones sobre una transferencia efectuada por importe de 97.440 euros.

[Cascos se pagó muebles de lujo y un viaje a Cancún tras recibir fondos de adjudicatarias de Fomento]

De nuevo, el 2 de junio de 2005, el gestor externo se dirige a Álvarez-Cascos "estimado Francisco", de nuevo para remitirle documentación de la compañía: los certificados anuales de IRPF de todos los empleados y los "libros oficiales de contabilidad de la sociedad Aqualium correspondientes al ejercicio 2004, para que una vez firmados por el administrador único, sean devueltos a la mayor brevedad posible".

Los libros de contabilidad debían ser firmados por quien oficialmente figuraba como administradora de la empresa, María Porto, pero en todos los casos el gestor comenta todos estos trámites con Álvarez-Cascos.

Escrito dirigido por el gestor externo a Francisco Álvarez-Cascos el 2 de junio de 2005.

Escrito dirigido por el gestor externo a Francisco Álvarez-Cascos el 2 de junio de 2005.

El exministro de Fomento no sólo participaba directamente en la gestión de la compañía —aunque lo ha negado siempre—, sino también se beneficiaba de forma directa de sus ingresos, como acreditan los documentos que ya tiene en su poder Anticorrupción.

Francisco Álvarez-Cascos cobró de Aqualium Spain SL, al menos entre febrero de 2005 y octubre de 2006, distintas facturas por importes que oscilan entre los 6.000 y los 15.260 euros, en concepto de "honorarios profesionales incurridos por asesoramiento a la dirección de la sociedad".

Es decir, cobraba por asesorar a su entonces mujer, María Porto, que era la cabeza visible de la empresa. En aquellas mismas fechas, Aqualium recibió cuantiosos pagos de las empresas que habían sido contratistas del Ministerio de Fomento.

También en aquellas fechas, el 26 de diciembre de 2005, Álvarez Cascos cobró de Aqualium una factura de 4.364 euros por "intermediación, edición y venta de obra gráfica original". Cobraba así de la empresa de su pareja como si fuera un pasante de arte, aunque en realidad es ingeniero de caminos, por la Politénica de Madrid. 

Factura emitida por Álvarez-Cascos a Aqualium Spain SL en 2005 por intermediación, edición y venta de obra gráfica original.

Factura emitida por Álvarez-Cascos a Aqualium Spain SL en 2005 por "intermediación, edición y venta de obra gráfica original".

En otros casos, las transferencias de Aqualium Spain al ex ministro de Fomento están declaradas en los movimientos bancarios como "devolución de préstamo"; entre ellas, 25.000 euros, el 6 de abril de 2006. 

La contabilidad de la empresa de compraventa de arte también incluye una factura de 49.000 euros, fechada en mayo de 2016 y emitida por un concesionario de coches de Lérida, por la compra de un Toyota Land Cruiser HDJ Diesel, que era conducido habitualmente por el exministro y exsecretario general del PP en la época de Aznar. El todoterreno está equipado cambio automático, navegador y tapicería de cuero.

Factura del Toyota adquirido en 2016 por 49.000 euros y conducido habitualmente por el exministro de Fomento.

Factura del Toyota adquirido en 2016 por 49.000 euros y conducido habitualmente por el exministro de Fomento.

Como ha informado EL ESPAÑOL, la empresa de arte también pagó varios viajes que disfrutaron Álvarez-Cascos y María Porto en 2005: dos vuelos a París uno costó 4.745 euros y el otro 7.834, incluyendo el avión y la estancia en hotel, otro a Argentina por 3.100 euros y otro a Cancún para seis personas el matrimonio y los hijos de ambos—, por 6.985 euros.

Por último, Aqualium Spain también pagó en octubre de 2005 una factura de 37.734 euros por la compra de muebles de lujo y el proyecto de decoración de un apartamento que María Porto poseía en Marbella (Málaga).

La compra incluye, entre otros elementos, cuadros del hall (689 euros), mesa de bambú para hall (360 euros), frigorífico (689 euros), dos sillas para terraza (760 euros), cómoda para dormitorio principal (869 euros), dos alfombras (1.325 euros), cama (904 euros), colcha (159 euros), cabecero de cuerda (227 euros), mesa de noche del dormitorio principal (484 euros), cuadros del segundo dormitorio (431 euros), cuadro del tercer dormitorio (475 euros), accesorios de baño (616 euros), objetos decorativos (190 euros), colocación de infrarrojos en tres baños y la cocina (748 euros) o cuatro baldas de roble natural para baño (1.554 euros en total).