España Coronavirus

Valentina, la trabajadora que desinfectó la tribuna de oradores del Congreso tras cada intervención

Los presentes han querido reconocer su labor y le han dado un aplauso cuando ha vuelto a subir a la tribuna para desinfectarla una vez que Casado la ha abandonado.

18 marzo, 2020 11:13

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Una trabajadora de los servicios de limpieza el Congreso desinfecta la tribuna de oradores del hemiciclo tras la intervención de cada una de las personas que están tomando la palabra en el Pleno monográfico sobre el coronavirus que tiene lugar este miércoles.

Esta trabajadora, llamada Valentina Cepeda, ha hecho su primera intervención durante el Pleno tras la primera alocución del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y justo antes de que hablara el líder del PP, Pablo Casado.

Protegida por una mascarilla, con guantes en las manos y equipada con un espray desinfectante, ella se encarga desde que comenzó el pleno de limpiar concienzudamente el atril de la tribuna, e incluso los micrófonos que recogen las palabras de Pedro Sánchez y de los demás diputados, cada vez que alguno interviene en la sesión.

Aplausos para la limpiadora del Congreso

Tras limpiar con una bayeta el atril, los micrófonos y las barandillas de las escaleras que dan acceso a la tribuna de oradores, la trabajadora se ha retirado ante el silencio de un hemiciclo cuasi vacío en el que sólo hay presentes 41 personas entre diputados, ministros y personal de la Cámara. Sólo la presidenta del Congreso, Meritxel Batet, le ha dado las gracias.

Pero los presentes sí han querido reconocer su labor unos minutos después y le han dado un aplauso cuando ha vuelto a subir a la tribuna para desinfectarla una vez que Casado la ha abandonado. También Batet ha vuelto a agradecerle verbalmente su trabajo.

"Gracias Valentina, y por extensión quiero agradecer a todos los trabajadores y trabajadoras del Congreso su presencia hoy aquí para poder celebrar este pleno", ha manifestado el jefe del Ejecutivo, unas palabras que han desatado aplausos de los escasos asistentes a la sesión plenaria, con el hemiciclo casi vacío.