Declaración judicial del abogado Raimon Bergós en el caso Noos.

Declaración judicial del abogado Raimon Bergós en el caso Noos.

España Los vídeos de los testigos de Noos (II)

"El asesor jurídico del Rey controlaba todo el proceso "

La Casa Real auditó la estructura que permitió a Urdangarin operar en la sombra tras abandonar Nóos.

8 enero, 2016 02:04
Daniel Montero Esteban Urreiztieta Gonzalo Araluce

Iñaki Urdangarin fingió que cesaba como responsable del Instituto Nóos para poder seguir con sus negocios públicos. Y lo hizo en marzo de 2006, guiado por la recomendación de la Casa Real. La institución consideró "inapropiados" sus negocios con administraciones como la balear o la valenciana, que le reportaron más de siete millones de euros en beneficios. Desde el estallido del caso Nóos, la Casa de Su Majestad El Rey se ha esforzado en mantener que desde entonces, el duque de Palma actuó a sus espaldas y violó las recomendaciones hechas por su principal asesor jurídico, José Manuel Romero, conde de Fontao.

Sin embargo, las declaraciones del caso, a cuyas grabaciones ha accedido en exclusiva EL ESPAÑOL, aportan una versión contraria. Un relato que coloca al abogado del Rey como asesor en la creación de fundaciones pantalla, entidades que sirvieron para que Iñaki Urdangarin siguiera en la sombra contratando con administraciones públicas.

Raimon Bergós

Se presentó como asesor jurídico de la Casa del Rey y de alguna forma daba la impresión de que estaba procesando o controlando todo el proceso y es donde hizo la petición formal de que [Urdangarín] no debía constar en los órganos de gobierno de Fundación Arete y de ninguna otra entidad privada.

Quien así habla es Raimon Bergós, abogado especializado en la creación de organizaciones benéficas. A su despacho en Barcelona acudieron Iñaki Urdangarin y Diego Torres para crear en mayo de 2006 la Fundación Areté, una entidad sin ánimo de lucro que debía articular parte de los negocios del duque. El abogado reconoce que tras crear la entidad, mantuvo una reunión con Urdangarin, Diego Torres y el Conde de Fontao. "Pensé que estaba controlándolo todo", explica al juez José Castro, encargado de la instrucción del caso desde Palma de Mallorca.

Bergós -salpicado por el caso Palau sobre la financiación ilegal de Convergencia Democrática de Cataluña y exsecretaro de la Fundació Orfeó Català- reconoce que la reunión con el asesor jurídico de la Casa Real se produjo un año después de que Urdangarin dejara de forma oficial el Instituto Nóos. El testigo explica que el conde de Fontao impidió al marido de la infanta Cristina figurar en los órganos de dirección de fundación alguna. Por eso, Urdangarin y Torres decidieron cerrar la Fundación Areté.

Raimon Bergós corte 2

Virginia López-Negrete:Dice usted que el Sr. Romero las órdenes que le dio al Sr. Urdangarin es que hiciera lo que quisiera pero que no apareciera en ningún órgano de gobierno, es eso cierto, verdad?

Raimon Bergós: Bueno que hiciera lo que quisiera.

VL: Es lo que ha dicho usted textualmente. Por dos veces.

RB: Sí, bueno en el sentido, sí, pero a nivel formal era que podía evidentemente, es una persona que podía actuar pero que si tenía que estar en una entidad que no podía estar en los órganos de gobierno.

Poco después -el 13 de diciembre de 2006- los dos socios crearon una nueva institución sin ánimo de lucro, otra fundación llamada Deporte, Cultura e Integración Social (FDCI). La entidad canalizó por ejemplo el contrato de 144.000 euros firmado con el Ayuntamiento de Madrid para que el duque de Palma participara en la promoción de la candidatura olímpica de la ciudad para los juegos de 2016. Además, FDCI era propietaria de la mayoría de las acciones de De Goes For Stakeholders, la entidad controlada por Diego Torres y radicada en Belice. 

30.000 euros camuflados en dos facturas

El dinero para crear la FDCI llegó de la mano de Joaquim Bioxareu, vecino y amigo personal de Iñaki Urdangarin. Según la tesis de la Fiscalía, el empresario sirvió de pantalla para desligar la fundación del entonces duque de Palma. Boixareu envió el dinero para crear la fundación y los fondos le fueron devueltos después con dos facturas remitidas al Instituto Nóos. En su declaración ante el juez, el empresario mantiene que remitió los fondos como gesto altruista, ya que se negaba a cobrar por los favores que como amigo realizó para Iñaki Urdangarin. "¿Y no era más fácil que le dijera usted invítame a una mariscada?", contesta el juez con sarcasmo.

Boixareu

Juez Castro: Era su dinero, usted invirtió su dinero. Usted cobró por hacer un favor a un amigo y que luego lo invirtiera en una obra social , es a parte, usted lo cobró. Si es que estamos hablando...

Joaquim Boixareu: Es que era a condición, sino no hubiera cobrado nada y me hubiera quedado mas tranquilo.

JC: Y no era más fácil decir – oye que no cobro nada, invítame a comer un día , invítame a una mariscada y hemos termido y hoy por ti y mañana por mi.

En su declaración como testigo, celebrada en Madrid en Marzo de 2013, el asesor jurídico de Zarzuela mantuvo ante el juez Castro que nunca tuvo relación directa con los negocios de Iñaki Urdangarin, pero que advirtió desde su puesto en la Casa Real actividades que no le gustaban. "Nada ilegal", matizó. "No entraba dentro de las normas mostrar la tarjeta para actividades privadas", explicó José Manuel Romero. Sin embargo, el juez Castro consideró la versión del conde de Fontao "poco creíble" y le recordó la existencia de correos electrónicos en la causa que demuestran su papel como tutor en los negocios del duque.

Correo cruzado entre el conde de Fontao e Iñaki Urdangarín.

Correo cruzado entre el conde de Fontao e Iñaki Urdangarín.

Y el duque que se marchó

Sobre el papel, la salida de Iñaki Urdangarin con el Instituto Nóos se produjo el 2 de abril de 2006, tras la reunión mantenida entre el cuñado del Rey y el asesor jurídico de la Casa Real. Según relató ante el juez Susana Zaragoza, trabajadora del Instituto Nóos, Urdangarin y Diego Torres reunieron a la plantilla al completo para informar de que el entonces duque de Palma iba a dejar el cargo. 

Susana Zaragoiza Año corte1

Susana Zaragoza: Nos reunieron, estábamos todos los que trabajábamos en aquel momento y de dirección Diego Torres, Ana Tejeiro, Marco Tejeiro, no lo recuerdo con mucha exactitud y nos dijeron que a partir de aquel momento Iñaki Urdangarin iba a dejar el Instituto o que haría tareas más representativas y que Diego cogía su relevo.

Sin embargo, la labor de Iñaki Urdangarin se mantuvo en la sombra, según varios de los testimonios recogidos también en el sumario del caso. De hecho, el marido de la infanta Cristina seguía participando como responsable directo en los actos que organizaba el Instituto Noos. Ayer, este diario desveló la declaración de Vicente Rambla, exvicepresidente de la Generalitat Valenciana. El responsable público reconoce que contrataban con el Instituto Nóos por la presencia del cuñado del Rey, después incluso de que Urdangarin comunicara de forma oficial su cese en la institución. Quien lo confirma ante el juez -entre otros- es Marcell Planellas, secretario general de ESADE y asesor externo contratado por el instituto Noos. Cobró 128.000 euros por sus trabajos para el Valencia Summit y el Forum Illes Balears:

Marcell Planellas

Fiscal: ¿En octubre del 2006 Iñaki Urdangarin estaba vinculado al Instituto Noos?

MP: Sí, era su presidente ¿no?

F:¿Estamos hablando de octubre del 2006? Como no se cansa de repetir el Sr. Urdangarin que en marzo del 2006 había abandonado el Instituto Noos y había desaparecido...

MP: Yo en todas las cumbres en las que asistí, las tres de Valencia Summit estuvo presente Iñaki Urdangarin y Diego Torres, porque además eran los organizadores.

F: Liderando el proyecto?

MP: Sí claro.

La versión de que Iñaki Urdangarin desapareció de la gestión del Instituto Nóos fue desmentida también por varios de los trabajadores contratados por el organismo. Ante el juez, reconocieron que pese a las advertencias de la Casas Real y al anuncio de que iba a pasar a un segundo plano como máximo responsable de la fundación, el entonces duque de Palma mantuvo de forma soterrada su actividad profesional en el Instituto Nóos. Así lo confirmó por ejemplo María Ángeles Almazán, que trabajó como secretaria en la entidad controlada por el cuñado del Rey:

María Ángeles Almazán