Imagen de unas gachas manchegas creada por IA.

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El plato típico manchego que fue prohibido por el régimen Franco en los años 60 por las enfermedades que derivaba

En 2015, la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición dictaminó que no supone riesgo alguno siempre que no se abuse.

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La cocina tradicional de nuestro país está llena de historias fascinantes como la de las gachas manchegas. Este humilde plato, símbolo culinario de Castilla-La Mancha, esconde un pasado oscuro ligado a los tiempos de hambre, la ciencia y al franquismo.

Uno de los ingredientes de esta receta histórica es la harina de almortas, también conocida como harina de guijas. La almorta es una leguminosa resistente capaz de crecer en suelos pobres y con poco agua, lo que la convirtió en una salvación durante la Guerra Civil y la posguerra.

Sin embargo, su consumo frecuente en las gachas reveló su peligrosidad y es que contiene un aminoácido neurotóxico llamado beta-ODAP. Esta molécula puede originar latirismo, una enfermedad que afecta al sistema nervioso y deriva en una parálisis en las piernas.

Harina de almortas a la venta online.

Harina de almortas a la venta online.

En los años 40, varios estudios médicos españoles relacionaron esta dolencia con el abuso de harina de almortas, un alimento muy habitual entre los campesinos que apenas podían permitirse otro alimento.

Ante los crecientes casos de afectación neurológica, el régimen de Franco prohibió oficialmente su consumo humano en 1967 mediante el primer Código Alimentario Español.

A pesar de ello, las gachas nunca desaparecieron en los pueblos de La Mancha, la receta se mantuvo viva y la harina de almortas se siguió comercializando pero como pienso para animales.

Gachas manchegas. / Foto: Turismo Castilla-La Mancha.

Gachas manchegas. / Foto: Turismo Castilla-La Mancha.

Con los avances científicos, el estigma sobre la leguminosa empezó a desaparecer. En 2015, la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición dictaminó que el consumo esporádico de almortas no supone riesgo alguno siempre que no se abuse.

Finalmente en 2018, se permitió de nuevo su uso para la cocina, cerrando así una de las historias más curiosas de la cocina española. Hoy las gachas manchegas se reivindican como uno de los platos estrella de la gastronomía de Castilla-La Mancha.

La famosa chef de Terrassa, Carla Soldevilla, más conocida en Instagram como @chefenials donde suma más de 230.000 seguidores, se ha atrevido a recrear esta receta donde "lo único difícil de este plato es conseguir la harina de almortas, por lo demás es un paseo".

Tras degustar este manjar con años y años de historia, la chef sentencia: "El sabor es muy diferente a cualquier otro plato que haya probado antes, os recomiendo muy mucho que lo probéis y forméis vuestra propia opinión".