Liberbank vende su filial inmobiliaria, Mihabitans, a Haya por 85 millones
Liberbank ha alcanzado un acuerdo por el que vende su filial de gestión inmobiliaria, Mihabitans, a Haya Real Estate por 85 millones, dentro de su estrategia para acelerar la reducción de activos improductivos, ha informado hoy el banco, que con la operación se anotará una plusvalía "muy relevante".
Además, Haya Real Estate, especializada en la prestación de servicios de gestión de activos financieros e inmobiliarios para entidades financieras y fondos institucionales, se convertirá en socio de Liberbank durante los próximos siete años.
De este modo gestionará de forma exclusiva los actuales activos inmobiliarios adjudicados en el balance de Liberbank y los futuros activos inmobiliarios adjudicados que sean incorporados al balance general del banco o de sus filiales inmobiliarias.
Haya RE, que actualmente gestiona más de 39.000 millones de euros en activos, reforzará la capacidad de gestión de Mihabitans y, en consecuencia, la aceleración del ritmo de desinversión de los activos inmobiliarios del banco.
Reducción de su morosidad
Liberbank, fruto de la fusión de Cajastur-Banco CCM, Caja Cantabria y Caja Extremadura, vendió en 2016 activos adjudicados por valor de 185 millones, un 262 % más que el ejercicio anterior.
Y durante el primer semestre de 2017, las ventas han ascendido a 132 millones, cerca de un 50 % más, al tiempo que ha llevado a cabo una operación de desinversión de una cartera de préstamos fallidos de 169 millones de euros.
El proceso de venta de la filial inmobiliaria comenzó a finales de mayo y se desarrolló a través de un procedimiento competitivo, en el que participaron varios candidatos, según desveló la entidad financiera recientemente a la CNMV.
Mihabitans es una filial 100 % de Liberbank y opera en el mercado desde junio de 2016, cuando se creó a partir de la unidad interna de activos inmobiliarios del banco.
Gestiona los activos inmobiliarios de todo el Grupo Liberbank, que superan los 3.000 millones de euros e incluye los de Banco de Castilla-La Mancha y los de Beyos y Ponga -de la antigua Cajastur-, entre otros.
La venta servirá para que Liberbank avance en su objetivo de reducir su morosidad por debajo del 9 % en 2017, frente al 11,3 % del cierre del primer semestre de 2017, para alcanzar el 5 % en 2018 y el 3,5 % en 2019.