Tras dos años algo atípicos, superado el tenso ambiente de Barcelona ocasionado por el veredicto del procés en 2019 y una de las ceremonias más íntimas y recatadas que se recuerdan, como consecuencia de las medidas tomadas por el Covid en 2020, vuelve el Premio Planeta por la puerta grande en una edición que celebrará los 70 años de la historia del galardón con un anuncio millonario. El reconocimiento, que hasta ahora presumía de ser el más dotado en letras hispánicas, amplía su cuantía a un millón de euros —200.000 se llevará el finalista— y se sitúa por encima incluso del Nobel de Literatura (que otorga unos 985.000). Un aumento que pretende ser un reconocimiento a los autores y que no busca que se refleje en el número de venta, al menos a corto plazo, según ha destacado el presidente del Grupo Planeta, José Crehueras.  

“El objetivo del premio siempre ha sido dar la máxima difusión y conseguir el mayor número de lectores. Siempre he pensado que una sociedad que lee es una sociedad mejor, y queremos aportar nuestro granito de arena”, ha sostenido Crehueras durante la rueda de prensa en un acto donde no se ha olvidado de reconocer la labor de los libreros “el puente entre el editor, el autor y el lector”, ni de los autores.  

Con cifra récord de participación, desde que en 1952 lo creara José Manuel Lara, 654 son las obras que se han presentado en esta ocasión, que vuelve con la alegría de “poder celebrar el premio en una situación de normalidad”, en una edición que se decanta por la novela negra y el género histórico y que llega en un momento de prosperidad literaria.

"Observamos una muy positiva evolución del sector", ha analizado el Director General de Planeta, Jesús Badenes. "En España este incremento de facturación ha venido de un incremento de la capacidad de compra de libros y eso es una muy buena noticia. Hoy en día el 50 por cierto de los españoles se consideran asiduos lectores de libros". Un nuevo panorama, tras la crisis por el covid, del que Badenes ha destacado el crecimiento del comic, la novela y del libro infantil y juvenil. "Creamos cantera de lectores jóvenes y ha imperado más la lectura de evasión, algo normal en tiempos de pandemia".

Los diez finalistas

Asesinatos, infanticidios, rituales de brujería… Fruto de esas lecturas de evasión, entre las diez obras seleccionadas, la tendencia por la novela negra, la fantasía y la novela histórica se imponen sobre la novela más convencional. Títulos como Ciudad de fuego, donde el autor bajo seudónimo de Sergio López siembra una oleada de crímenes infantiles en la que se verán arrastrados un periodista, un policía y una niña; o La llama del pasado, de Aurelio González González con la historia de una casa encantada o una herencia maldita comparten opciones con novelas como El túnel de Oliva, de Jorge Sánchez López -una trama de crímenes y traiciones- o El viaje de Camilla Seymour (seudónimo), donde una afamada escritora se ve obligada a volver a su pueblo natal para hacerse cargo de su padre y, de paso, resolver los enigmas del pasado.

Mientras que tirando del género policiaco más tradicional, El canto del grajo, de Fermina Cobos (seudónimo) recrea la atmósfera de un orfanato, un tétrico lugar que sirvió como tapadera de prostitución infantil, en el lado más convencional de la novela, Donde el recuerdo nos lleve, de Elahanleys (suedónimo), se nos cuenta la historia de un joven que tras perder a su esposa en el atentado de Atocha del 11 de marzo supera su desdicha gracias a la amistad que construye con una anciana de nombre María.

Dentro del género de la novela histórica, destacan las propuestas del escritor salmantino Benito González, que se presenta con la obra Barbarie y el sobrenombre de El Arlequinado. Ambientada en la Nochevieja del año 406 d. C. en Hispania, muestra la crueldad de los hunos y reconstruye una historia donde las mujeres adquieren todo el protagonismo. Por su parte, Hijos de la ira, de Yuri Zhivago recorre la historia del siglo XX a través de los infortunios de una familia española.

Llama la atención la presencia del periodista mexicano, Antimio Cruz Bustamente, que con su primera y única novela, Descalza voy contigo, una obra que se enmarca dentro del realismo mágico, se disputará este codiciado galardón que, en el último momento y sin previo aviso, ha decidido cambiar las bases y ampliar su dotación a un millón de euros.

70 años de Premio Planeta

A lo largo de su trayectoria el Premio Planeta ha recaído en nombres como Ana María Matute, Torcuato Luca de Tena, Jorge Semprún, Juan Marsé, Manuel Vazquéz Montalbán, Juan Eslava, Gonzalo Torrente Ballester, Antonio Gala, Camilo José Cela o Mario Vargas Llosa, entre otros muchos, a los que se han sumado los más recientes Dolores Redondo, Javier Sierra, Santiago Posteguillo, Javier Cercas y Eva García Sáinz de Urturi.

A tan solo 24 horas de desvelarse finalmente el nombre del nuevo ganador como es habitual durante el transcurso de una cena literaria presidida por SS. MM. los Reyes en el Museu Nacional d'Art de Catalunya de Barcelona, el premiado tomará el relevo de Eva García Sáenz de Urturi, Premio Planeta 2020, por su novela Aquitania, un 'thriller' medieval sobre Leonor de Aquitania , en una edición en la que resultó finalista Sandra Barneda por la obra Un océano para llegar a ti.

@mailouti