Mercedes Halfon (Buenos Aires, 1980) es una escritora que convierte en poético todo lo que toca. Es fácil entenderlo cuando se sabe que ha publicado cinco poemarios; más aún cuando se ha leído El trabajo de los ojos (2019), su primer libro en prosa. En esta obra hermosa, Halfon entregaba un texto rabiosamente actual en el que cabía la hibridación de géneros, el carácter autoficcional (la autora se presentaba como personaje de su propia creación), la brevedad (atributo que conecta con la rapidez del presente) y la fragmentariedad, que enlaza con la anterior y permite una lectura atomizada. Todo esto es válido para Diario pinchado, una novela corta y amena que cuenta con mayor actitud narrativa que la anterior.

En esta nueva obra Halfon enfrenta a su narradora-protagonista a un viaje a Berlín, ciudad en la que va a reencontrarse con un novio con el que había compartido la vida en Buenos Aires. Él está allí disfrutando de una beca para desarrollar sus capacidades de escritor. La historia discurre a lo largo de dos meses (mayo y junio), en la fría primavera centroeuropea de cielos cubiertos y sol tímido, y se articula en la forma de un diario que en ocasiones se dirige a un tú.

Cuando llega, la mujer espera emocionada recuperar su relación y que su visita distraiga a su pareja de la laboriosidad en la que está inmerso, pero poco a poco se da cuenta de que el tiempo separados, los nuevos espacios y las preocupaciones berlinesas han hecho de él otra persona (“mucho más difícil que la distancia es la cercanía”, dirá), aunque ella también vivirá hechos que la transformarán para siempre.

'Diario pinchado' es un hermoso libro de lectura ágil, lleno de literatura y rebosante de ideas, sensibilidad y poesía

Halfon mira la realidad desde la experiencia de la poesía, como ya señalé: “Vengo leyendo muchos textos sustentados en la creencia de que todo puede ser poesía”, dice, y ella misma escribe partiendo de esa certeza. Su novela nos adentra en una historia que se sustenta en lo premonitorio y nos prepara (la prepara) para un giro en la narración que ni su personaje ni nosotros sospechábamos cuando aterrizó en Alemania. El texto, además, se apoya sobre un constante diálogo entre pares: el ambiente rioplatense y el berlinés, la luz y la oscuridad, el mar y el bosque, el ruido y el silencio, el ayer y el ahora, la ilusión y la decepción, el amor y el desamor, el recuerdo y la realidad, la escritura y la vida.

Y mientras todo eso sucede, la protagonista de la novela crece, aprende a valerse por sí misma, cultiva el arte de la soledad, se forma en la ciencia del desengaño y se ilustra en la difícil técnica de orientarse en la naturaleza y en la vida. Hermoso libro de lectura ágil, lleno de literatura y rebosante de ideas, sensibilidad y poesía que también recoge un intenso paseo (exterior e interior) por una ciudad fascinante y llena de contrastes.