Diego Doncel.

Diego Doncel (Malpartida, Cáceres, 1964) ha ganado el Premio de Novela Café Gijón 2012 con En el tiempo de la infamia, una narración con la II Guerra Mundial como marco de una trama de espionaje, amor y aventuras, que según el jurado del galardón, presidido por Rosa Regàs, "está muy bien construida y resuelta de forma eficaz con un apasionante desarrollo". La obra será publicada por la editorial Siruela a finales de enero del año próximo.

La historia arranca en la idílica costa de Liguria, en Génova. Una bailarina del Ballet de la Ópera de París conoce a un importante científico, especializado en la investigación en biomedicina. Ese encuentro desencadena una serie de avatares que trascienden del plano sentimental al político. "En el fondo, lo que trataba de reflejar es el impacto que la historia tiene sobre las personas", explica Doncel a elcultural.com en el mismo Café Gijón, poco después del anuncio público de su nombre como ganador del premio.

"Hay momentos en los que los individuos construyen la historia y otros en que la historia se impone a ellos y los lleva a rastras", añade. No le cabe duda de que tanto la actualidad como el periodo que disecciona En el tiempo de la infamia pueden encuadrarse en este segundo supuesto. "Estamos viviendo tiempos infames, como los que desencadenaron la II Guerra Mundial", remacha lapidario.

Pero ambos protagonistas pueden dar al lector contemporáneo ejemplos de resistencia frente al arrollador curso de los acontecimientos. Un modelo de rebeldía que busca coger por los cuernos el devenir histórico, para domeñarlo y transformarlo en un lapso de tiempo donde los hombres no sean meras piezas en un tablero movidas por los intereses de otros hombres con mucho más poder. "Otro de los aspectos que quería demostrar es que un régimen político es siempre, también, un régimen económico. Bajo los gobernantes de una época determinada siempre hay un entramado de intereses financieros que se expanden en los más diversos ámbitos". En el tiempo de la infamia se centra en el terreno de la medicina y la industria farmacéutica, que por entonces tenía un peso específico notable en términos monetarios. "Hay que tener en cuenta que fue la época en que se inventó la aspirina y el paracetamol, y muy poco antes la penicilina".

Diego Doncel, también poeta (ganó el Premio Adonais en 1990 con El único umbral), afirma que en esta novela no hay rastro de la vertiente más lírica de su trabajo literario. "He seguido lo que defienden Stendhal, Dickens, Murakami...: que la prosa debe ser eficaz, estar al servicio de la historia. Mi poesía, por otra parte siempre ha sido muy narrativa. Vamos hacia una literatura donde los géneros se hibridan: la novela tiende al ensayo o al diario, la poesía tiende a la prosa...".

Diego Doncel, que también ejerce la crítica literaria, es también autor de Una sombra que pasa, En ningún paraíso, Porno ficción . En novela, ha escrito El ángulo de los secretos femenino y Mujeres que dicen adiós con la mano.

El jurado, presidido por la escritora y exdirectora de la Biblioteca Nacional Rosa Regás, ha estado formado por José María Guelbenzu, Mercedes Mommany, Antonio Colinas, y Marcos Giral Torrente. El Premio de Novela Café Gijón, dotado en la actualidad en 20.000 euros, fue instituido como réplica del Premio Nadal en 1949. La idea surgió del actor Fernando Fernán Gómez y de unos amigos con los que compartía tertulia en el emblemático café madrileño, entre los que se contaban Camilo José Cela, Manuel Aleixandre y Eduardo Haro Tecglen.