Este breve e interesante retrato de Aristóteles, tomado del magnífico texto de Werner Jaeger (Aristóteles. FCE, 1992), constituye una digna aproximación a un filósofo que en la historia del pensamiento se ha convertido en la incardinación, por excelencia, del espíritu filosófico y científico. La filosofía de Aristóteles, que comienza con el hallazgo de un instrumento para comprender mejor la ciencia y que termina en una metafísica que subordina la teología, la teoría del mundo físico y la doctrina del alma como entelequia del cuerpo, se redondea, como afirma Ferrater Mora, con una doctrina ética y política que representa no tanto el imperativo de la razón sino de lo razonable. Nacido en Estagira (de ahí que a veces sea llamado "el Estagirita"), Macedonia, en el año 384 a.C., Aristóteles fue preceptor y amigo de Alejandro Magno. Tras su muerte en Calcis, isla del Mar Egeo, en el año 322 a.C., su extensa obra constituye un punto de referencia indispensable para todos.