Tres grandes bandas de Estados Unidos marcan el inicio del otoño: The National, LCD Soundsystem y The War on Drugs brillan con fulgurante intensidad marcando con enormes discos una rentrée que supone el clímax musical de este 2017 que ha hecho esperar sus mejores bazas. Tiempo también del hip hop contundente y rockero del supergrupo Prophets of Rage y el gamberrismo experimental de Tyler the Creator. Psicodelia y melancolía pop en el nuevo disco del madrileño Wild Honey y el angelino Ariel Pink que contrasta con el tremendismo dramático de lo nuevo de Zola Jesus sin olvidar el regreso de los reyes del ruido, Foo Fighters.




The National: Sleep Well Beast. Pop/rock

En el cambio de década, The National publicaron High Violet (2010), uno de esos discos que marcan época. En 2013, Trouble Will Find Me fue recibido, si no como una decepción, sí como un cierto estancamiento en el sonido de una banda que estaba llamada desde entonces a contarse como una de las más grandes de su tiempo. En medio de una gran expectación, el grupo de Ohio liderado por Matt Berninger, compositor y cantante, se supera a sí mismo con Sleep Well Beast, probablemente el mejor disco de pop/rock de este 2017 en el que refinan su propio estilo para llevarlo a altas cotas líricas. Para los que echaban de menos un gran single en su anterior disco, ahí está ese "Day I Die" con una fantástica melodía en la que brilla ese "rock adulto" de la banda con un toque de mordacidad e ironía marca de la casa para acto seguido seducirnos con esa "Walk it Back" en la que los arreglos electrónicos aderezan una canción fantástica en la que abundan en esa especie de melancolía de la mediana edad que es todo el disco. Hay temas de una conmovedora dulzura como es "Dark Side of the Gym" que casi parece una nana infantil y otras que son quintaesencialmente The National, esa mezcla entre Tindersticks y R.E.M., como "I'll Still Destrroy You".




LCD Soundsystem: american dream. Pop/rock/electronica

Fue hace cinco años cuando el grupo formado por James Murphy y Tim Goldsworthy anunciaba que después de tres discos épicos se acabó una de las uniones musicales más espectaculares de la década pasada. Ya sabemos que en estas cosas, por suerte, nunca hay que hacer caso a los músicos. Después de su regreso a los escenarios el año pasado, con parada en el Primavera Sound en uno de los mejores conciertos que se han visto en España, LCD Soundsystem siguen en la brecha ¡y de qué manera! Herederos del sonido punk de Nueva York que va de los Sucide de Alan Vega al intelectualismo retorcidamente romántico de Lou Reed sin olvidar la influencia de Talking Heads o Blondie, american dream nos propone de nuevo un viaje a las raíces del punk vía electrónica en un álbum sensacional que tiene algo de la urgencia y la rabia de unos Run the Jewels. Ahí están temas como "call the police", que parece recuperar el espíritu callejero y gamberro de unos Beastie Boys, u "other voices", la perfecta canción de LCD Soundsystem.




The War on Drugs: A Deeper Understanding. Pop/rock

Fue hace tres años cuando The War on Drugs, el grupo de Adam Granduciel obtuvo un gran éxito con Lost in the Dream, tercer disco de la banda tras la marcha de Kurt Vile. Con un sonido que recordaba a las grandes bandas de rock adulto de los 80 como Fleetwood Mac o la "americana" de Bruce Springsteen, esa colección de canciones de gran impacto emocional nos sumergía en un mundo propio de guitarras y sintetizadores que parecía reproducir la capacidad hipnótica de unos Spaceman 3. Más de lo mismo, en el mejor sentido, en este "A Deeper Understanding", en el que los temas de la banda parecen reverberarse eternamente como si se tratara de un bucle infinito de emoción, melancolía y un atisbado vitalismo. Ahí están temas como ese "Holding On" en el que parece brillar un renovado optimismo o "Pain", en el que logran una melodía tan fantástica como en la ya mítica "Red Eyes".




Prophets of Rage: Prophets of Rage. Hip hop/rock

Muchos recordarán la canción que da título a este supergrupo incluida en el álbum de Public Enemy It Takes Millions to Hold Us Back (1988). No todo es malo con la llegada de Trump a la presidencia, y estos Prophets of Rage surgen como contestación a una presidencia que ha puesto en pie de guerra a los artistas más reivindicativos de Estados Unidos. El grupo está formado por miembros de Cypress Hill (B-Real), Rage Against the Machine (Tom Morello) y los propios Public Enemy (Chuck D) y solo con estas credenciales uno se puede imaginar por dónde van los tiros, rock duro y hip hop combativo que levanta el ánimo a un muerto como ese single "Unfuck the World", en el que las tres bandas parecen recuperar ese espíritu contestatario y brutal que los define.




Wild Honey: Torres blancas. Rock

El madrileño Guillermo Farré define el tercer disco de su Proyecto Wild Honey, y primero en castellano, como "una fiesta en la casa del cuadro de Hollywood Swimming Pool de David Hockney bajo un sol de plomo con The Carpenters y Stereolab entre los invitados y los Beach Boys como anfitriones". El mismo define mejor que nadie un álbum en el que Sean O'Hagan (The High Llamas, Stereolab) compone los arreglos cuerda y Frank Maston se encarga de la producción. Tiene el disco algo de ese Hawai, Bombay de Mecano en el que Ana Torroja soñaba con el paraíso en una realidad gris. Brochazos de melancolía y de ironía bien entendida en canciones como esa "Mapas de zonas desiertas", en la que un espíritu tropicalista deconstruido se mezclan con un pop lounge de sofisticación y decadencia con homenaje a Francisco Casavella incluido o la melancolía cotidiana en esa fantástica "Horóscopo".




Ariel Pink: Dedicated to Bobby Jameson. Psicodelia/Pop

Personaje peculiar de la escena angelina, Ariel Pink (sin la coletilla del Haunted Graffitti), Ariel Marcus Rosenberg juega tanto con su aspecto como con su música con un cierto bizarrismo cuyo objetivo es crear al mismo tiempo una cierta extrañeza como una soterrada ternura. Ariel Pink tuvo un gran éxito con su último disco, pom pom (2014) y en su continuación nos propone un viaje parecido por los confines del pop en clave psicodélica haciendo un uso extensivo de la caja de mezclas que en su caso suena como una trituradora. Artista posmoderno, el mundo de Rosenberg es delirante y fragmentado, como escenas pintorescas y alteradas de una misma realidad caleidoscópica.




Foo Fighters: Concrete and Gold. Rock

La leyenda de Nirvana sigue viva con Foo Fighters, la superexitosa banda del ex batería Dave Grohl. Han pasado muchos años desde los tiempos de Kurt Cobain y desde entonces la banda se ha labrado una identidad propia basada en hacer mucho ruido y dar brillo a ese rock americano sin concesiones que conjuran de maravilla. Cambio de productor para su nuevo disco, Greg Kurstin, una elección que puede resultar sorprendente o incluso mosqueante para sus muchos fans aunque no hay que preocuparse demasiado, a pesar de ser el colaborador de Sia o Adele (¡hasta dónde hemos llegado!) si bien es cierto que el disco tiene unas melodías mejor afinadas, Foo Fighters siguen basando en la contundencia su mejor baza y por momentos siguen pareciendo AC/DC. Atentos a temas como "The Sky is A Neighbourhood" con ese riff de guitarra a lo Deff Leppard o esa "Run" en la que reviven el espíritu de Guns n' Roses.




Tyler the Creator: Flower Boy. Hip hop

Aunque los tiempos de Odd Future hoy casi parecen prehistoria, fue de ese grupo de hip hop surgido hace una década en Los Angeles donde nació el actual dominio de la ciudad californiana en el terreno no solo del rap, también de la música de vanguardia contemporánea. Mientras otro de sus integrantes, Frank Ocean, conocía una gloria mundial o Earl Sweatshirt se convirtió en el rapero adolescente por antonomasia, la estrella de Tyler the Creator parecía haberse ido apagando después de haber sido su más brillante figura. Recibido con grandes elogios por parte de la crítica internacional, este sensacional Flower Boy nos devuelve al artista en todo su esplendor. Gamberro y experimentador, el disco nos regala unos cuantos dúos de gran altura con artistas tan variopintos como ASAP Rocky ("Who Dat Boy", espíritu old skool) o el ínclito Jaden Smith ("Pothole", homenaje a la marihuana).




Zola Jesus: Okovi. Electrónica/Pop gótico

La música de la compositora y cantante de Phoenix y ascendencia rusa Zola Jesus no es como para tomársela a broma. Con una solemnidad rotunda que recuerda a esa trascendencia brutal de una Diamanda Galas, la artista sigue por sus fueros en su quinto álbum, que por momentos parece una especie de ceremonia de coronación de un zar ruso en la que todo el mundo va hasta las trancas de LSD. El gran mérito de Nika Danilova es atreverse a ir hasta el fondo de la tragedia sin rodeos para regalarnos una colección de canciones tremendas en las que sentimos literalmente como se rasga las vestiduras y se retuerce las heridas en un crescendo emocional que te deja destrozado. A veces cerca del pop de Lorde en temas como "Soak" o "Wiseblood" y otras más cercana al tremendismo de Galas ("Remains"), hay belleza en este disco al que cabe conceder la virtud de la falta de cortapisas.



@juansarda