“Quiero conectar con el alma de París”, dijo Gustavo Dudamel cuando se presentó como flamante nuevo director musical de la Ópera de París, en abril de 2021. A juzgar por su decisión de renunciar a este cargo, que acaba de trascender, no parece que el maestro venezolano haya alcanzado este propósito. Aduce que tras ella solo hay “motivos personales”. Al cierre de esta temporada, dejará la capital gala. A partir de entonces se concentrará en rematar su vínculo con la Filarmónica de Los Ángeles, para, después, ponerse al frente de la Filarmónica de Nueva York, que anunció que lo había fichado en febrero.

En Nueva York, precisamente, acaba de dirigir una Novena de Mahler culminada con una ovación apabullante del público. Es un reto que le hace mucha ilusión, ya que tomará el relevo de batutas de la talla de Gustav Mahler, Arturo Toscanini y Leonard Bernstein. Será ya en 2026 cuando tome posesión efectiva del podio neoyorquino, durante un mandato que se prolongará a lo largo de cinco años.

Todo esto ha de ser una gran decepción para Alexander Neef, el director de la Ópera de París, que ‘persiguió’ al máximo exponente de la excelente cantera venezolana del Sistema Nacional de Orquestas Juveniles fundada por José Antonio Abreu. Neef, que había sustituido en París al influyente Stephan Lissner, veía en Dudamel uno de los cimientos de su proyecto en el Palais Garnier y la Ópera de la Bastilla. Neef todavía no ha dicho nada al respecto de la sucesión de Dudamel, más allá de pedir más tiempo para hacer una elección adecuada, a la altura de la casa parisina.

A Dudamel, que está casado con la actriz española María Valverde, a la que conoció en Los Ángeles en 2016, se le ha atragantado la distancia de su familia. Un océano de por medio se le ha hecho demasiado grande. "Ha sido un privilegio compartir momentos tan hermosos” con los artistas con los que se ha embarcado en varias producciones operísticas, ha comentado. Dudamel también ha confesado que no tiene “otros proyectos que estar con los míos. Les estoy profundamente agradecido por su apoyo en mi objetivo de crecer y superarme".

Desde 2021, en apenas dos años pues, ha dirigido allí breve lista de óperas: Turandot de Puccini, Le nozze di Figaro de Mozart, Tristan und Isolde de Wagner y más recientemente una nueva producción de Nixon en China de John Adams. La escasa aparición de Dudamel en los carteles de la temporada próxima había hecho despertar algunas sospechas. Ahora no está claro si mantendrán sus compromisos Lohengrin y The Exterminating Angel. La experiencia de Dudamel en París ha quedado en fogonazo.