Llevaba tiempo Alexander Neef cortejando a Gustavo Dudamel. Finalmente, los cantos de sirena del actual director de la Ópera de París, puesto en el que sucedió a Stephan Lissner en 2020, han conseguido su objetivo. Hoy Neef, antiguo discípulo del polémico Gerard Mortier, ha anunciado que el maestro venezolano, de 40 años, será el nuevo director musical de la prestigiosa institución, una de las grandes casas de ópera en Europa. Dudamel, que llega como un chute de energía tras la desastrosos meses de la Ópera de París por culpa de la pandemia, compaginará el nuevo cargo con la dirección de la Filarmónica de Los Ángeles, donde renovó su vinculación hasta 2029.

El popular maestro, que toma el relevo de Philippe Jordan en la capital gala, se pondrá así al frente de una orquesta con la tenía muy buena sintonía. Se había metido en el bolsillo a sus músicos con su estilo enérgico y pirotécnico, aunque bien es cierto que ha ido ganando en sobriedad con el paso de los años. Neef ha enunciado las razones que le han conducido a realizar este ‘fichaje’: “Él es uno de los directores de orquesta con más talento y prestigio del mundo. Una persona fascinado por el mundo de la ópera desde una edad temprana que ha dirigido numerosas obras líricas con tanta inteligencia musical. Elegí enseguida a este director excepcional”.

Ha añadido que durante los últimos diez años ha tenido la oportunidad de escucharle en la trilogía Mozart/Da Ponte al frente de la Los Angeles Philharmonic, así como en obras de John Adams y, más recientemente, en el Otello de Verdi en la Metropolitan Opera de Nueva York y también en el Liceo de Barcelona. “Su dirección musical me conquistó, al igual que a su público. A través de nuestras numerosas conversaciones, me di cuenta de que era él quien podría compartir y transmitir su amor por el arte lírico al mayor número de personas”, ha concluido Neef, que cree que en Dudamel ha encontrado el director idóneo para abarcar el repertorio desde lo clásico a lo contemporáneo.

Por su parte, Dudamel que figuraba como favorito -junto a Thielemann y Nelsons- en las quinielas para suceder a Rattle en el podio de la Filarmónica de Berlín, en el que finalmente se asentó por sorpresa Kirill Petrenko, ha descrito su amor a primera vista con la orquesta parisina: “En cuanto levanté la batuta por primera vez, mi experiencia con los artistas de la Ópera de París fue sencillamente magnífica. Lo que sentí de inmediato durante aquel decisivo encuentro —una sensación de confianza, afinidad, musicalidad y visión compartida— nacieron de ese primer encuentro en 2017”.

Se refiere a su participación en La Bohème de Puccini escenificada por Claus Guth, no sin controversias. “El excepcional nivel de los músicos de la Orquesta y de los artistas del Coro, y el fuerte vínculo que pudimos crear durante los ensayos y las representaciones me han hecho aceptar la propuesta de Alexander Neef”. Por último, Dudamel ha anunciado su intención prioritaria: “Hacer que la Ópera de París esté cada vez más conectada con el alma de la ciudad y del país que la rodea”.

@alberojeda77