Qué gustazo ver sobre el escenario a Herbie Hancock pletórico a sus 82 años. Una leyenda que se desenvolvió a las teclas en el último Jazzaldia con más frescura y descaro que muchos músicos emergentes. Que tomen nota del maestro. No hubiera estado de más tampoco que sacaran la libreta la noche en que Mulatu Astatke, a punto de convertirse en octogenario como Hancock, explosionó en las Noches del Botánico, donde asimismo nos deleitó Snarky Puppy.

Una suerte tener de vuelta a estos gigantes (no olvidamos a Abdullah Ibrahim), que tanto echamos en falta durante los años del plomo vírico. En ese tiempo, nos aferramos al talento local, no precisamente escaso. Dos de nuestras máximas figuras, Moisés P. Sánchez y Marco Mezquida, brillaron de nuevo. Inagotables ambos.

El primero, residente en el CNDM, siguió escanciando sugerentes sinergias con la clásica. En el Festival de Santander echó mano de sus ‘reinvenciones’ bachianas y, en el Canal, nos transportó más allá de Beethoven. El segundo, que se embolsó en Múnich el premio BMW Welt, no le va a la zaga en esta alquimia sonora: en San Sebastián también entró al trapo del gran cantor de Leipzig.

En Villanos del Jazz, protagonismo femenino: Peyroux, Wright, Reeves, Gardot

A ambos los tendremos a mano el próximo febrero en el CNDM. Madrid fue una fiesta del jazz gracias al aglutinador Festival Villanos del Jazz. Falló a última hora Ron Carter pero no faltaron los demás invitados. Protagónica presencia femenina: Madeleine Peyroux, Lizz Wright, Dianne Reeves, Melody Gardot… Fue un año en el que recordamos también a Charles Mingus por su centenario, sustanciado con el lanzamiento de sus memorias, Menos que un perro (Kultrum).

1. Herbie Hancock

Jazzaldia de San Sebastián

2. Madeleine Peyroux

CNDM (Villanos del Jazz), Festival Voll-Damm

3. Mulatu Astatke

Festival Noches del Botánico y Jazzaldia

4. Moisés P. Sánchez

Festival de Santander y Teatros del Canal

5. The Bad Plus

Villanos del Jazz (Teatro Pavón)