Fernando Benzo, secretario de Estado de Cultura

Esta mañana sonaban las campanas del mundo del cine ante el anuncio del secretario de Estado de Cultura, Fernando Benzo en declaraciones a la cadena Cope. Parecía, según sus palabras, que por fin se iba a satisfacer la vieja demanda de bajar el IVA del cine, que pasaría del actual 21 al 10%. Incluso se decía que ya estaba todo concretado para los Presupuestos de 2018. Benzo aseguraba que "las cosas en nuestra economía están yendo bien y, por tanto, cumplimos nuestra palabra en un primer momento con los espectáculos en vivo y ahora llega el momento de seguir cumpliendo nuestra palabra con el IVA para el cine. Antes de que termine el 2018 creo que lo veremos".

Es en ese "creo" en el que quieren poner el acento fuentes del Ministerio de Cultura, que aseguran que su secretario "simplemente estaba expresando un deseo". Es decir, se mantienen en la línea de lo que ya se había anunciado antes en repetidas ocasiones, por el momento la bajada del IVA del cine trata más de deseos que de realidades. Máxime cuando reconocen, que "a la hora de tomar esta decisión carecen de las adecuadas competencias", que no recaerían en su ministerio, sino en el de Hacienda.

El pasado 29 de junio, el IVA para todos los espectáculos en directo descendió al 10 % viendose beneficiadas las entradas para conciertos, teatro, danza, toros y discotecas. La medida llegaba después de casi cinco años de reivindicaciones y excluía al cine, lo que provocó inmediatas protestas por parte del sector.

Fue en julio de 2012 cuando el Gobierno decidió subir el IVA aplicado a las entradas para espectáculos en directo y al cine del 8 % al 21 %. La subida de trece puntos fue el resultado de subir el IVA reducido del 8 al 10 %, el IVA "normal" del 18 al 21 %, y la eliminación del carácter reducido del impuesto en las manifestaciones culturales mencionadas, mientras que el sector del libro conservó el IVA superreducido del 4 %.

Aunque sin fechas ni cuantías concretas, Benzo ya anunció estas bajadas el pasado mes de marzo, en la presentación del Plan Cultura 2020. En este paquete de medidas figuraba la "disminución progresiva de la imposición indirecta que afecte al ámbito cultural en colaboración con el Ministerio de Hacienda y Función Pública". Parece que tendremos que seguir esperando.