Ramón Colom, presidente de FAPAE, durante la rueda de prensa. Foto: Pipo Fernández

Ramón Colom, presidente de FAPAE, ha aprovechado la celebración del 25 aniversario, para insistir en que los productores no quieren que la financiación del cine corra a cargo del Estado.

La Federación de Asociaciones de Productores Audiovisuales de España (FAPAE), comenzó su andadura en abril de 1991, hace 25 años, así que su actual presidente Ramón Colom ha aprovechado la habitual rueda de prensa ofrecida en el Festival de Cine de Málaga para echar la vista atrás y realizar un balance del cine español de 1991 a 2016.

A lo largo de estos años, además de su representatividad institucional, FAPAE ha conseguido posicionarse como un referente en la fuente de datos del sector. En este sentido, la Confederación ha realizado un balance sobre los últimos 25 años del cine español. Colom ha repasado el estado actual del cine español con cifras comparativas desde 1991, momento en que la FAPAE empieza a controlar los datos, con la conclusión de que a lo largo de esos 25 años se han multiplicado por cinco el número de empresas activas, que producen una mayor diversidad de géneros y se ha triplicado el número de coproducciones internacionales. Sin embargo, el coste medio de las películas españolas se ha reducido en los últimos años, volviendo a niveles del año 2000, con 1,8 millones de euros.

El respaldo del público al cine español se ha duplicado en los 25 años de existencia de su organización. "A veces nos fustigamos demasiado y no tenemos en cuenta lo positivo", ha señalado el productor catalán, "pletórico", ha dicho, por los datos de aceptación del cine español en los últimos años. "El cine español ha conseguido conectar con los espectadores y se ha producido un cambio en la percepción y valoración de nuestro cine". El número de espectadores se ha duplicado; En 1991 fueron 9,1 millones de espectadores y en 2015, 18 millones. Así, en 1991 la cuota de mercado era de 10,9% y en 2015 de 19%. En lo que va de año, el cine español ha obtenido 36 millones de recaudación, casi el doble que en el mismo período de 2015, y un 19,3 % de cuota de pantalla; esta cifra, a fecha del 18 de abril, es similar a la que se logró en todo 2015.

162 películas españolas fueron vistas por más de medio millón de espectadores y 75 de éstas superaron el millón de espectadores a lo largo de los últimos 25 años. En 1991, solo una película española superó el millón de espectadores, Tacones Lejanos. En 2015, son cinco los largometrajes los que han superado este listón: Ocho apellidos catalanes, Atrapa la bandera, Perdiendo el norte, Regresión y Ahora o Nunca, al igual que en 2006, 2008, 2009 y 2014.

Cabe destacar el aumento en un 803% de los premios internacionales a la cinematografía española, pese al descenso en un 36,7 % de la presencia del cine español en los festivales internacionales: en 2000, fueron 147 los títulos españoles que participaron en certámenes fuera de España, y en 2014 la cifra se redujo a 93 películas.

Aún así, el presidente de la Confederación de productores audiovisuales españoles, ha advertido de que hay objetivos irrenunciables por los que han luchado y seguirán luchando en los próximos años, el primero de ellos, "casi como un grito de guerra", ha dicho, "que nos saquen de los Presupuestos Generales del Estado". "No queremos tener que ir a ver al ministro de Hacienda de turno para explicarles cada vez que el dinero que hay es poco. Queremos salirnos de los Presupuestos Generales del Estado, el cine tiene que financiarse con el cine, como Francia, Italia o Alemania", ha añadido.