Francisco Calvo Serraller

Su profusa carrera académica estuvo centrada en el siglo XIX, pero desde su puesto de crítico de El Pais, el catedrático y exdirector del Museo del Prado se convirtió en uno de los referentes imprescindibles del arte contemporáneo en España. Francisco Calvo Serraller (Madrid, 1948) ha fallecido en la capital a los 70 años tras sufrir durante largo tiempo una enfermedad degenerativa.

Licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad Complutense de Madrid, se doctoró en Historia del Arte e inició su actividad docente en 1970, siendo posteriormente elegido catedrático de Historia del Arte Contemporáneo en 1989. Además, dirigió brevemente el Museo del Prado entre 1993 y 1994, y desde 2001 era también miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando donde ingresó en 2001 con un discurso sobre Naturaleza y misión de la crítica de arte.

La dedicación al arte de Calvo Serraller no se circunscribe a su faceta crítica o docente. A lo largo de su carrera, el catedrático ha producido numerosas obras de interés, entre las que destacan antológicas como Teoría de la pintura del siglo de oro (1981), España: medio siglo de arte de vanguardia: 1939-1985 (1985), Del futuro al pasado. Vanguardia y tradición en el arte español contemporáneo (1989), Artistas españoles entre dos fines de siglo: de Eduardo ­Rosales a Miquel Barceló (1991), Enciclopedia del arte español contemporáneo (1992), Breve historia del Museo del Prado (1994), La imagen romántica de España. Arte y arquitectura del siglo XIX (1995), El siglo XIX en el Museo del Prado (1996), Paisajes de luz y muerte: la pintura española del 98 (1998) o El arte contemporáneo (2001).

Finalista del Premio Nacional de Ensayo en 1987, también se ocupó de ensayos sobre grandes artistas como Velázquez (1991), El Greco (1995), Goya (1996), Rafael (1997), o La constelación de Vulcano. Picasso y la escultura del hierro del siglo XX (2004); y dirigió colecciones de arte en distintas editoriales: Turner, Alianza Forma, Mondadori...

Calvo Serraller fue, además, comisario de gran número de exposiciones en centros importantes, entre las que destacan: Naturalezas españolas (Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, 1988), El bodegón español. De Zurbarán a Picasso (Museo de Bellas Artes de Bilbao, 1999-2000), Goya. La imagen de la mujer (Museo del Prado, 2001), Flores españolas del Siglo de Oro (Museo del Prado, 2002), El expresionismo abstracto americano en las colecciones españolas (Museo Esteban Vicente de Segovia, 2003), Picasso. Tradición y vanguardia (Museo del Prado, 2005), y la reciente Doce fotógrafos en el Museo del Prado, que todavía puede verse en la pinacoteca madrileña.

En cuanto ha trascendido la noticia, el Museo del Prado ha hecho constar su "profundo pesar por el fallecimiento de quien deja una huella imborrable en todos los que trabajamos con él y una impronta señera en la institución que él situó en el lugar que se encuentra hoy". El comunicado de la pinacoteca subraya "su capacidad intelectual, su talento, su fuerza a la hora de motivar equipos y la brillantez conceptual con la que adornaba cualquiera de sus proyectos merecen hoy ser recordados".

Miguel Falomir, actual sucesor en el cargo de director de la institución, se ha mostrado también consternado por la pérdida del crítico. "Como director del Museo del Prado solo puedo expresar la orfandad en la que nos deja, particularmente doliente en este momento, cuando la institución que tanto amó celebra su Bicentenario", ha declarado a través de un comunicado. "Como tantos otros espíritus libres e ilustrados, Francisco Calvo se identificó con lo que el Prado significaba como esencia de las mejores virtudes de nuestro país y así lo propagó en múltiples exposiciones y publicaciones".

Por su parte el ministro de Cultura, José Guirao, ha lamentado la muerte de Calvo Serraller en otro comunicado donde recuerda que su fallecimiento "es una pérdida enorme para la historia del arte en España y para el mundo del arte. Ha sido uno de los historiadores del arte más brillantes, un crítico de arte excepcional y un magnífico profesor universitario", ha dicho. En opinión del ministro, compañero del gremio, con la muerte del crítico "desaparece uno de los más destacados representantes de la generación que a finales de los setenta y ochenta marcaron la imagen y la trayectoria del arte contemporáneo español, de su internacionalización y de la crítica del arte internacional que en aquellos años empezó a llegar a nuestro país".