Vista interior de la Biblioteca Pública de Ceuta

El premio de Arquitectura Aga Khan ha dado a conocer los finalistas de esta edición y entre ellos se encuentra el proyecto de un estudio español. El jurado del galardón, que es otorgado a una obra concreta, ha tenido la labor de escoger 19 entre 348 trabajos. La Biblioteca Pública de Ceuta, del estudio Paredes Pedrosa, opta de esta manera a uno de los mayores galardones arquitectónicos que está dotado con 100.000 dólares. El siguiente paso es la investigación de cada proyecto y para ello arquitectos, especialistas en conservación e ingenieros visitarán y evaluarán cada uno de los edificios. A partir de sus análisis el jurado del Aga Khan tomará la decisión de premiar uno de ellos.

Una zona arqueológica meriní es el centro de los espacios de lectura de la Biblioteca Pública de Ceuta. Los arquitectos Parades y Pedrosa trabajaron junto a un arqueólogo para ofrecer un sentido de apertura y transparencia entre la biblioteca y el centro meriní. El programa del proyecto está organizado de manera vertical en siete niveles, tres de ellos con vistas a los restos arqueológicos. Los arquitectos quisieron unificar el edificio que estaba compuesto por diversos elementos para darle un sentido de uniformidad. La idea que desarrollaron fue la de un 'velo' que vinculara todas las partes y el corte de doble pared en la fachada, construido con paneles metálicos, responde a la idea de filtrar la luz y proteger el interior de los fuertes vientos que azotan la zona.

Torre nazarí de Huércal Overa (Almería) restaurada por Castillo Miras Arquitectos

También se encuentra entre los 19 finalistas la restauración de la torre nazarí de Huercal-Overa por Castillo Miras Arquitectos. El proyecto explora la dicotomía entre la construcción sólida (una torre nazarí del siglo XIII) creada por artesanos anónimos y la provisional y degradable naturaleza de lo contemporáneo. Las adiciones a la construcción original se conciben como futuras ruinas y objetos temporales extraíbles colocados directamente en el suelo. La restauración de la torre consistió en la preservación de los materiales originales, la eliminación de adiciones modernas y la repavimentación de la pared de barro original y fábrica de ladrillo interior.

Durante las últimas cuatro décadas, se ha defendido las necesidades y aspiraciones de los seres humanos dentro de la práctica de la arquitectura. El galardón no sólo premia a los arquitectos, sino que también identifica los municipios, los constructores, los clientes, los maestros artesanos e ingenieros que han participado en la realización de cada proyecto. El premio se puso en marcha hace 39 años y son más de 110 proyectos los que han recibido el premio y se han documentado más de 9.000 proyectos de construcción.