Bartomeu Marí en el MACBA

Sigue la polémica en torno al MACBA. El penúltimo episodio viene de la mano de la Comisión Delegada del museo: acepta la dimisión del director, Bartomeu Marí, una renuncia que colocó en la mesa del patronato el pasado viernes, aunque no sin antes prescindir de las responsabilidades del hasta ahora Conservador jefe, Valentín Roma, y del Jefe de Programas públicos del museo, Paul B. Preciado. "Pérdida irrecuperable de confianza", señala el director.



Lo anunciaba hace unos días: "habrá consecuencias", decía a El Cultural. Ambos comisarios llegaron al museo hace poco más de un año y ambos firman la exposición La bestia y el soberano, la punta del iceberg de esta historia, una exposición que Marí canceló antes de inaugurar el pasado miércoles y que abrió el sábado al público, previo arrepentimiento, presión mediática y comunicados: de los comisarios de la exposición, de todas las asociaciones de artistas, de la de museos, del Instituto de Arte Contemporáneo y hasta del Württemberg Kunstverein de Stuttgart (WKV), que coproduce la exposición.



Desde el Consorcio del MACBA también ha llegado otro comunicado, del que han participado el consejero de Cultura de la Generalitat, Ferran Mascarell; el teniente de alcalde de Cultura, Jaume Ciurana, el presidente de la Fundación MACBA, Leopoldo Rodés; el director de promoción de sectores culturales del ICUB, Llucià Homs y la subdirectora general de Cooperación Cultural con las Comunidades Autónomas, Begoña Torres. Jaume Ciurana, ha explicado que abrirá "de forma inmediata" un concurso público internacional para buscar un nuevo director e iniciar así una nueva etapa en la institución. Un proceso que puede alargarse tres o cuatro meses, por lo que Bartomeu Marí seguirá dirigiendo el museo hasta entonces. Todos lamentan que la exposición "haya trascendido el ámbito dialogante y constructivo que debe presidir la relación entre los responsables de una institución pública".



"Es evidente que esto no se ha gestionado bien; si no, no estaríamos todos aquí", dice el político, que admite una crisis profunda de la institución, a la que ahora pretende dar salida con una nueva andadura después de siete años de Marí al frente del museo, desde que llegara en abril del 2008 para sustituir a Manuel Borja-Villel. Sin pronunciarse sobre la obra de Ines Doujak, desencadenante de la historia, la Comisión Delegada pone el acento en el desencuentro entre los comisarios y el director.



Este declive institucional abre un debate urgente en Barcelona, que no es nuevo. Recordemos cómo la política cultural redefinía un nuevo mapa del arte en la ciudad con el caso Canódromo... ¿Cuál es la base real de este desencuentro en el MACBA? ¿Desde cuándo esta crisis? ¿Qué presiones internas proyecta el museo? ¿Hay un dedo político tras esta historia? ¿De quién? ¿Qué papel juegan los Consejos políticos en las estructuras culturales públicas? ¿Puede un director de museo cesar a su equipo sin más? ¿Por qué no hay artistas en el Consorcio del MACBA? ¿Por qué tampoco cuentan con profesores de universidad, críticos u otros profesionales? ¿Cuáles son los límites del museo?