Ilustración: Ulises

¿Qué libro tiene entre manos?
Fragmentos de un cuaderno manchado de vino, de Charles Bukowksi.

¿Ha abandonado algún libro por imposible?
La guía de Venecia.

¿Con qué personaje le gustaría tomarse un café mañana?
Igor Stravinski.

Cuéntenos alguna experiencia cultural que cambió su manera de ver la vida.
Un día en que alguien del público me regañó en el Covent Garden de Londres por ir a la ópera con una camiseta sin mangas.

¿Qué nos cuenta La increíble historia del violin?
La historia de mi violín, que yo medio me inventé con 16 años para impresionar a mis colegas que tenían stradivarius, guarnerius... Mi violín era normal y común y así podía ponerme a su altura.

¿Cómo se relaciona con su violín: como con un amigo, una amante, un maestro...?
Cuando era niño, mi padre me decía que el violín es como un genio que hay que frotar y frotar para que realice tus deseos. Así que es mi genio.

¿Cómo describiría el salto de la interpretación a la composición?
No lo considero un salto porque sigo siendo intérprete. Además, siempre he compuesto aunque ahora es cierto que más que antes y lo estoy disfrutando muchísimo.

¿Qué cambia cuando uno se interpreta a sí mismo?
Uno aprende que la interpretación es muy libre. Para cualquier compositor que uno toca no hay una sola manera de hacerlo, sino miles. Y eso vale para toda la historia de la música.

¿Qué tiene el violín que no tengan otros instrumentos?
Yo estoy enamorado del violín. Tiene el virtuosismo, el lirismo, el juego de la armonía. Puede ser muy travieso y también muy obediente. Por eso para mí es el instrumento por excelencia.

¿Qué piensa cuando los puristas de la música culta le miran con recelo?
Me encanta, me motiva.

¿Entiende, le emociona, el arte contemporáneo?
Me emociona cualquier tipo de arte que me llega. Puedo no entenderlo pero tampoco a veces entiendo cosas clásicas o románticas. Lo importante es que me toque, me da igual que sea contemporáneo o no.

¿Cuántas veces va al teatro al año?
Prácticamente todos los días.

¿Alguna obra que le haya dejado clavado en la butaca últimamente?
El Fausto de Tomaz Pandur.

¿Le importa la crítica? ¿Le sirve de algo?
Muchísimo, me encanta la crítica del público, de los niños, de mis amigos, de mi familia... De todo aquel que me aporte algo.

¿Qué música es la que más suena en su casa?
Suena siempre música, pero cambia constantemente. Ahora estoy escuchando mucho jazz manouche.

¿Es de los que recelan del cine español?
Me encanta. Hay películas grandiosas, muy buenas. Aunque vivimos en una época en que se le ponen muchas dificultades para que pueda triunfar. Merece más oportunidades.

¿Le gusta España? Denos sus razones.
Obviamente me gusta, por eso estoy aquí. Es difícil elegir por dónde empezar, pero sobre todo me atrae su multiculturalidad de tantos siglos.

Regálenos una idea para mejorar la situación cultural de nuestro país.
España es un país con mucha pasión hacia el arte, la música, el teatro, la danza, la pintura... Muy rico en cultura. No tiene nada que envidiar a ningún otro. Pero últimamente parece una cuestión menos importante. Hay que cuidarla y ayudar a la creación. Habría que reducir el 21% del IVA, por ejemplo, pero esto es sólo una medida de entre las muchas que se podrían tomar.