El escritor, editor y librero Abelardo Linares. Foto: El Mundo

Marta Caballero
El escritor y fundador de la editorial Renacimiento, regente además de la librería sevillana del mismo nombre, está en ese lugar incierto por el que caminan, tras la feria, los que no se muestran ni apocalípticos ni integrados con la cita de El Retiro. Tras sus muchos años dedicados al libro, la ocasión para él es más que nada una excusa para ver a los amigos y para hablar de literatura, un elemento que, entre tanta tecnología y tanta crisis, pasa de puntillas por, parece mentira, su gran fiesta.

PREGUNTA.- ¿Cómo se vive esta feria en plena crisis para alguien que es librero, editor y escritor?
R.- Como una estupenda ocasión para estar al aire libre, ojear libros y, sobre todo, charlar con los amigos.

P.- La organización ha relacionado la bajada del 9,5 por ciento de las ventas con el mal tiempo. ¿Cree que en ese descenso influyen otros factores?
R.- En todos los descensos, sobre todo en los vertiginosos, influyen sin remedio varios factores.

P.- ¿Verdaderamente hablamos del 9,5 por ciento o ha sido peor?
R.- En mi caso el descenso ha sido bastante más grande, lo que incluso le añade emoción.

P.- Muchos libreros exigen que la feria replantee su modelo, que se reinvente, ¿es de la misma opinión?
R.- Soy de la opinión que sólo exige quien puede. En nuestro caso, libreros y editores debiéramos pedir. Después de todo, nunca se sabe.

P.- No sé si ha tenido la posibilidad de charlar con compañeros y colegas, ¿cómo están los ánimos?
R.- Los ánimos los he visto bastante buenos. De todos modos, con los colegas he hablado más bien de libros y de libros.

P.- En esta feria en crisis se ha observado una gran disminución de la variedad en los libros, pues la mayoría de los libreros va a por apuestas seguras. ¿Ha sido su caso?
R.- La feria está pensada, ante todo, para que los curiosos puedan comprar allí el mismo libro que pueden comprar a la vuelta de la esquina, sólo que con un diez por ciento de descuento. El caso de los pequeños editores de fondo es bastante distinto, aunque sea un caso más bien de intriga, suspense y misterio.

P.- ¿Qué cosas podría mejorar la organización de cara a la próxima edición?
R.- Habría que pensarlas poco a poco con alguna prisa.
P.- ¿Ha podido asistir a las actividades paralelas, hay alguna que le haya suscitado interés?
R.- No he asistido a ninguna actividad paralela, pero sí a una oblicua y muy grata: la exposición de la librería Polifemo de libros sobre el libro.

P.- Usted que lleva muchos años en la feria, ¿puede decir si la de ahora es mejor o peor que la de hace unos años?
R.- Creo que fue mejor cuando las ferias y yo mismo éramos más jóvenes.

P.- Ante las circunstancias presentes (llegada del ebook, crisis económica, disminución de lectores...) ¿hacia dónde va el libro?
R.- A mí me parece que va hacia el siglo XVIII. Que no haya más de un treinta por ciento de lectores. Por lo demás, bien.