Cataluña se pasa a la pelota vasca en plena deriva independentista

La pelota vasca ya no es un deporte exclusivo de Euskadi. En los últimos años Cataluña está decidida a disputarle al norte peninsular el honor de ser el epicentro de su deporte por excelencia. La organización del campeonato internacional, con la presencia de los mejores pelotaris del mundo y el plan de la Generalitat, con el apoyo del Ayuntamiento de Barcelona, imparte enseñanza en las escuelas sobre este deporte, y colocan a esta comunidad autónoma como uno de los lugares de referencia en pelota de nuestro país, casualmente en una época donde la vorágine independentista está más ligada que nunca a los eventos deportivos.

Clases de pelota en los colegios catalanes

A raíz de esta nueva 'moda' por un deporte con una tradición centenaria, son los jóvenes catalanes en edad escolar los que se están iniciando en la pelota vasca. El Ayuntamiento de Barcelona, decidió, con el apoyo de la Generalitat,el programa 'L’escola fa esport a la ciutat', que consiste en impartir clases de este deporte para que los estudiantes de entre 10 y 16 años conozcan las normas y aumente su afición a practicarlo habitualmente.

Es en esos jóvenes que lo practican en el ámbito escolar donde recae el futuro de la pelota vasca. Ahora, Barcelona vuelve a apostar por este deporte que perdió protagonismo años atrás por la falta de patrocinadores y de retransmisiones televisivas.

'Frontball': un videojuego para sustituir el frontón

Las nuevas tecnologías también han hecho su aparición en un deporte que busca la popularidad entre los más jóvenes a través de una de las herramientas que tienen a su alcance: los eSports. Un proyecto de colaboración entre la Federación Española de Pelota (FEP) y Play Station pretende crear 'Frontball' el primer videojuego de pelota que traslada la modalidad del mismo nombre -y con normas muy similares a las de la pelota tradicional- a la consola en busca de hacerla más accesible al público más joven.

Con el apoyo del gigante tecnológico, la estrategia de la FEP pasa por llevar el 'Frontball’ a los colegios a través de unidades didácticas, vídeos, jornadas de promoción, formación del profesorado y material deportivo adecuado, especialmente del que está compuesta la pelota, más blando y resistente que el que habitualmente se utiliza para la pelota vasca.

La pelota vasca resurge lejos de Euskadi

Cada vez son más las regiones interesadas en esta disciplina que organizan campeonatos para que los aficionados disfruten de ella sin tener que desplazarse. Como consecuencia de este auge, nuevos pelotaris han comenzado a surgir en lugares diferentes al País Vasco, Navarra o La Rioja, zonas donde tradicionalmente la pelota ha tenido protagonismo sin que nadie le hiciese sombra. Madrid, Canarias o Murcia son algunos de los lugares de procedencia de los representantes españoles en la cita mundialista.

México fue el país organizador del Mundial de pelota en 2014 en un intento por dar a conocer este deporte en Centroamérica. En el sur de este continente se encuentra la otra gran potencia en el deporte del frontón. Chile tiene una gran tradición en pelota, especialmente en las modalidades de paleta. Organizó el Mundial de 2016 con muy pocos recursos: apenas dos frontones que tuvieron que acondicionar en tiempo récord para la puesta en marcha del torneo y cuenta con unas 200 licencias de jugadores amateur. 

El pasado año fue Barcelona la que acogió el campeonato del mundo, al que asistieron 300 pelotaris llegados desde 14 países diferentes y en el que hubo otras tantas modalidades diferentes. España es la selección que más mundiales ha albergado y la que tiene un palmarés más amplio: 183 medallas, de las cuales 69 son de oro; seguida de cerca por Francia con una menos y 178 medallas en total.

En la Ciudad Condal este deporte ya contó con protagonismo en la mayor cita deportiva de su historia: los Juegos Olímpicos, cuando fue uno de los deportes de exhibición en 1992 y en el que España cosechó diez medallas.

Cataluña cuenta con el 'Messi de los pelotaris' 

Dos pelotaris son los máximos representantes de la pelota vasca en Cataluña. Emiliano Skufca, un argentino afincado allí y Agustí Brugués, barcelonés con nacionalidad estadounidense, fueron los dos representantes residentes en esta comunidad autónoma organizadora del Mundial. 

Skufca, conocido como 'el Messi de los pelotaris', llegó en 2002 a Barcelona. En 2004 se integró al Club Natació Barcelona y, tras conseguir la nacionalidad española en 2005, se unió al equipo español. En su haber tiene dos mundiales de paleta cuero y otros tantos de paleta corta, aunque en la pasada edición se le resistió el tercero al caer ante la pareja francesa. 

El caso de su homólogo en la pelota catalana es totalmente opuesto, pero también singular. Agustí Brugués es hijo del presidente de la federación catalana. Su condición de estadounidense por parte de madre le permitió competir en el pasado Mundial junto a su compañero navarro defendiendo a la selección norteamericana. Esta decisión fue consensuada con su padre, que le aconsejó que aprovechase la oportunidad de participar al no tener cabida con España.

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