Xabi Alonso, en el estadio Carlos Tartiere

Xabi Alonso, en el estadio Carlos Tartiere Europa Press

Fútbol

Las pizarras de Xabi Alonso y Ancelotti, cara a cara: los cambios visibles (y no tanto) que definen al nuevo Madrid

El equipo blanco carbura tras arrancar La Liga con dos victorias. El tolosarra no lleva ni 100 días en el banquillo, pero su mano se nota.

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Si el Mundial de Clubes fue el prólogo del Real Madrid de Xabi Alonso, el primer capítulo de su historia se escribe en estas jornadas iniciales de La Liga. El resumen corto es: dos victorias ante Osasuna y Oviedo sin encajar goles.

Los números son positivos y las sensaciones también. El Madrid juega más compacto, va más a las presiones y genera más ocasiones. Son las claves en las que coinciden todos los análisis de lo visto en dos jornadas que van hasta la fecha.

Atrás queda el gris final de la etapa de Carlo Ancelotti, un mero reflejo de lo que llegó a ser aquel vestuario campeón de la Champions en 2022 y 2024. La última temporada enterró todo aquello con un equipo partido dentro y, en parte también, fuera del campo.

Xabi Alonso no lleva ni 100 días al frente del Real Madrid ni se han disputado diez partidos oficiales con él en el banquillo. Sin embargo, los cambios están ahí. Los hay que son visibles y los hay que no lo son tanto.

Alguno dirá que no hay evolución si no hay cambios en el dibujo. Hasta ahora, Xabi ha salido con un 4-3-3 en los dos partidos de Liga; mismo esquema utilizado por Ancelotti en los días importantes el curso pasado. Nada que ver lo que dice el papel con lo que se ve en el campo.

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Mismos dibujos (o parecidos). Diferentes ideas. Comparando las primeras visitas del Real Madrid de la temporada 2024/25 —jornada 1, ante el Mallorca— y de la 2025/26 —jornada 2, ante Oviedo—, se ve que el de Xabi es un equipo con las líneas más juntas y varios metros más adelantado en el campo.

Las posiciones medias de algunos jugadores son reveladoras. Atrás se encuentra a Huijsen casi en la línea del centro del campo y a un lateral zurdo, Carreras, mucho más avanzado. Güler aparece por dentro, detrás de un Mbappé mucho más centrado. Y aunque en el Tartiere no fuera Vinicius titular, sino Rodrygo, ni el brasileño ni Kylian quedan tan descolgados arriba.

Este Madrid, el de Xabi, resuelve mejor la ocupación de espacios: por ejemplo, Valverde aparece entre Güler y Mastantuono, sin la obligación de ir tanto a la base. Así el 'calor' se extiende en el mapa por todo el frente de ataque y no deja los vacíos tan conocidos del curso pasado.

No dice el mapa la mejoría en las presiones tras pérdida, que ha entendido hasta Vinicius —así generó el 0-2 ante el Oviedo—. Y así nace un Madrid más insistente de cara a la portería rival: el doble de remates y de tiros a puerta que en la primera visita del curso pasado.

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Xabi Alonso va construyendo un castillo de naipes para el que cuenta con todos. Hasta con Rodrygo: "Es uno más". Del brasileño, por cierto, no se espera que salga en la última semana de mercado. Otra cosa es lo de Ceballos (tras su "last dance" en Oviedo y la aparición en escena del Marsella).

Lo que sí va dejando claro el tolosarra es que no se casa con nadie. De Osasuna al Oviedo hizo cuatro cambios y solo mantuvo intacto el centro de campo —a la espera de Bellingham y Camavinga—. Sentó hasta a Vinicius, que no se lo tomó del todo bien, pero luego en el campo acabó siendo importante la media hora que jugó.

Esa personalidad que va demostrando Xabi Alonso en sus decisiones se ve también en los cambios (más pronto, importante en agosto cuando pesan las piernas) y en contar con la cantera. Confió en Gonzalo en el Mundial y ya es uno más del primer equipo y al juvenil Thiago Pitarch ya le ha llamado en las dos convocatorias de Liga, opositando al hueco que podría dejar Ceballos si se va.

Aún queda trabajo, como reconoce el propio Xabi, aunque hay pilares que se van estableciendo. Como un Tchouaméni que sirve de soporte atrás y en la medular. O "la inversión" en Güler al timón del juego. Incluso Carreras dando empaque al carril zurdo. Pero hay dos futbolistas a destacar especialmente.

Huijsen, lo más parecido a Kroos

Uno es Dean Huijsen. El central de 20 años, fichado desde el Bournemouth por 62,5 millones de euros, no ha necesitado tiempo de adaptación. Xabi insiste tanto en empezar la defensa desde las vueltas de los delanteros como en arrancar las ofensivas con el empuje desde atrás, y ahí el hispano-neerlandés brilla.

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Huijsen ha sido el jugador que más toques y pases ha dado en el Real Madrid en seis de los ocho partidos que lleva con su camiseta. Ante el Oviedo dio 100, con una precisión del 88% (81,7% en campo rival).

Lo interesante está, sobre todo, en el terreno que ocupa. Logra incrustarse con el balón en medio del campo, pisando por zonas que solían ser para el anhelado Toni Kroos cuando era la manija del Real Madrid. Huijsen representa mucho más que un defensa e impulsa la salida en el juego de manera brillante.

El líder es Mbappé

El otro es, claro está, Mbappé. Se siente por fin el líder que tiene que ser. Con el '10' a la espalda. Nadie suma más goles que él en estas dos jornadas (3) y si se suman las últimas del campeonato pasado resultan en 12 tantos en siete partidos. Letal. Números que solo se pueden comparar a los tiempos de Cristiano Ronaldo.

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Ante el Oviedo dio un recital ofensivo: marcó un doblete haciendo siete remates (tres a puerta, uno fuera y tres bloqueados), pero además creo otras tres ocasiones. Si a eso se suman, por ejemplo, tres duelos ganados, Mbappé reúne todo lo que pide Xabi a su jugador referencia.

Dicen tanto las estadísticas como su gesticulación y relación con otros compañeros, especialmente con Vinicius, al que protegió cuando entró en trifulca con la grada del Tartiere. El Mbappé de siempre —en números—, líder como nunca.

El nuevo Real Madrid ha nacido. La mano de Xabi Alonso se nota, y mucho. Una tarea que le vendrá será encajar a Bellingham, que para nada es un jugador que romperá la táctica, como se aventuran a decir algunas voces. El tolosarra le espera.

En un once de gala, una idea que rondará la cabeza de Xabi, es que Bellingham actúe tras Mbappé como se ha visto a Güler. El turco podría rascar aún más bola, tirándose a la zona de un Valverde con mucha banda que explotar.

¿Y Mastantuono? El argentino de 18 años ha calado rápido y tendrá muchos minutos. Como a su vuelta Camavinga, y hasta Rodrygo si sigue como este domingo. Ya lo dijo Xabi tras el partido: "Tenemos veintipico jugadores en plantilla y voy a intentar sacar lo mejor de todos ellos".