Varias integrantes de Les Hijabeuses

Varias integrantes de Les Hijabeuses Les Hijabeuses

Fútbol FRANCIA

'Les Hijabeuses', el equipo de fútbol femenino que lucha en Francia por poder jugar con hiyab

La Federación Francesa de Fútbol argumenta que rompería con el principio de neutralidad religiosa. Las leyes nacionales y la FIFA sí se lo permiten.

20 abril, 2022 02:15

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En los suburbios de París han crecido grandes estrellas del fútbol francés como Paul Pogba, Kylian Mbappé y Ngolo Kanté. Pero el fútbol femenino de este país también vive una revolución desde estos mismos lugares. Es el ejemplo de Karthoum Dembelé, una joven que desde que tenía seis años ha jugado a este deporte y siempre lo hizo con hiyab. Ahora, perteneciendo a Les Hijabeuses, lucha porque pueda hacerlo junto a otras compañeras de forma profesional con este atuendo.

El debate sobre el uso del hiyab en el deporte francés está más candente que nunca. El velo que cubre la cabeza y el pecho de las mujeres musulmanas que se usa en presencia de personas que no sean de su familia inmediata ha provocado una agria polémica con este equipo de fútbol al que la Federación Francesa de Fútbol no le permite disputar encuentros con el atuendo. Aunque la legislación nacional y la FIFA lo permiten, el ente del balompié galo se opone.

Mama Diakité, centrocampista que también trabaja con 'Les Hijabeuses', vivió una oportunidad en el último mes cuando su equipo amateur llegó a Sarcelles para enfrentarse al club local y le permitieron jugar con este atuendo. Pero sabe que es una excepción. La FFF ha prohibido a los jugadores que participan en competencias usar símbolos religiosos llamativos como el hiyab, según afirman, acogiéndose a los estrictos valores seculares de la organización.

Aunque la prohibición se aplica de manera poco estricta en el nivel amateur, se ha cernido sobre las jugadoras musulmanas durante años, destrozando sus esperanzas de carreras profesionales. Al frente de la lucha está Les Hijabeuses, un grupo de jóvenes jugadoras de fútbol de diferentes equipos que usan hiyab y que se unieron para hacer campaña contra lo que describen como una regla discriminatoria. Confían en coger fuerza con el debate que se ha circunscrito con los Juegos Olímpicos de París 2024.

El debate

El problema radica en que en Francia se está discutiendo si su uso debe prohibirse durante eventos y competiciones deportivas. Se considera que la prenda es un símbolo religioso "ostensible" y en el país galo quieren erradicar todos estos elementos del deporte. El debate comenzó después de la propuesta de ley del Senado (con sector dominante del partido republicano de derechas) a finales del pasado mes de enero.

Todavía no se ha tomado una decisión firme. Pero el debate ha creado malestar en la comunidad musulmana. Esto, además, ha adquirido también un plano mayor de relevancia internacional por la próxima edición de los Juegos Olímpicos. Desde el Comité Olímpico Internacional (COI) todavía no quieren hablar abiertamente sobre el debate que se está viviendo en Francia. Pero el organismo ya ha dejado claro que su "mandato" es el de "garantizar que no haya discriminación en los Juegos Olímpicos" y que todos "los atletas" puedan "competir y vivir juntos". Habrá polémica.

Mientras tanto, Les Hijabeuses plantan batalla. Su activismo ha tocado una fibra sensible en Francia, reviviendo acalorados debates sobre la integración de los musulmanes en un país cada vez más multicultural, donde el fútbol femenino está en auge. Founé Diawara, presidenta de este equipo de 80 jugadoras que pertenecen a diferentes clubes amateur, deja claro que el "único deseo es jugar al fútbol". "Lo que queremos es ser aceptados como somos, implementar estos grandes lemas de diversidad e inclusión", explica a The New York Times.

Un balón y un hiyab

El colectivo Hijabeuses se creó en 2020 con la ayuda de investigadores y organizadores comunitarios en un intento de resolver la paradoja de la legalidad. Los partidarios de la prohibición dicen que los hiyab presagian una radicalización islamista que se hará cargo de los deportes. Mientras tanto, este grupo de jugadoras muestra con sus historias personales cómo el fútbol ha sido sinónimo de emancipación.

Diakité comenzó a jugar fútbol a los 12 años, inicialmente ocultándolo de sus padres, quienes veían el fútbol como un deporte de niños: "Quería ser una jugadora de fútbol profesional". Debido a la prohibición, decidió respetar su religión y renunciar al fútbol profesional. Dembelé tiene 19 años y también tuvo que enfrentarse a su familia. Hace cuatro años conoció esta prohibición y no le quedó otra vía que rendirse. Otras chicas incluso se decantaron por otros deportes que sí les permitía jugar con hiyab.

En enero, un grupo de senadores conservadores trató de consagrar en la ley la prohibición del hiyab de la federación de fútbol. Al frente de todo esto estaba Stéphane Piednoir, un hombre que también trató de incluir la exhibición de mensajes católicos de Neymar Júnior con sus tatuajes. La enmienda finalmente fue rechazada por la mayoría del gobierno en el parlamento. La realidad es que seis de cada 10 franceses apoyan la prohibición de los hiyab en la calle.

Además, todo esto dependerá del resultado de las elecciones galas. Marine Le Pen representa a la extrema derecha que se enfrentará al presidente Emmanuel Macron en la segunda vuelta este domingo 24 de abril. La candidata ha explicado que, de ser elegida, prohibirá el velo musulmán en los espacios públicos. Esta cuestión crearía grandes rencillas de cara a la cita de París 2024 ante la llegada de deportistas que usan el hiyab. Antes, estas chicas seguirían sin tener su oportunidad de jugar al fútbol de manera profesional.

[Más información: Debate | ¿Debería prohibir Francia utilizar el hiyab en los JJOO de 2024?]