Las noticias no eran muy alentadoras respecto a la salud de Diego, pero parecía que todo había ido bien. No me esperaba que llegara esta noticia. Maradona es uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol y tuve la suerte de compartir vestuario con él. Yo le conocí en sus inicios, era una persona muy humilde. Quizá fueron sus mejores momentos.

El único problema que ha tenido este país es que la lesión en la primera temporada y la enfermedad en la segunda privaron al fútbol español de ver mejor a Maradona. Era una persona tímida en ese momento. Tenía 21 años y, aunque en Argentina ya era una estrella, Europa no le conocía. Si tuviera que poner un valor en alza sería ese, el de la cercanía.

Acababa de fichar por el Barça. Llegamos Julio Alberto, Urbano, Marcos, Perico Alonso y yo el mismo año. Fuimos unos afortunados, unos espectadores privilegiados. Le veíamos cada día en los entrenamientos y nos dimos cuenta de que era un jugador excepcional. Si nos quedamos solo con los partidos, el aficionado no se quedó con la perspectiva de una estrella. Si ves las cosas que hacía, ves que era un crack.

De izquierda a derecha: Marcos Alonso, Pichi Alonso, Urbano, Maradona, Julio Alberto y Perico Alonso

De izquierda a derecha: Marcos Alonso, Pichi Alonso, Urbano, Maradona, Julio Alberto y Perico Alonso

Era un chico introvertido. Notó la sensación de cruzar el charco en ese momento, con 21 años. Ahora los jugadores a esa edad están más formados y preparados. Tanto de cabeza como de físico. Se convirtió en un líder sin querer. Se sentía nostálgico de su tierra en los primeros días.

Los argentinos son muy patriotas. Son muy de su tierra. Diego añoraba a su pueblo, pero se terminó haciendo a Barcelona. La casa de Pedralbes se convirtió en su pequeña Argentina. Nos invitó a toda la plantilla un día a un asado. Allí nos encontramos a 15 personas: amigos, familia, hermanos... Diego necesitaba a ese entorno en ese momento.

Como todos, tenía más empatía con unos que con otros, como siempre ha pasado en los vestuarios. En cualquier caso, era una persona muy normal. No era soberbio, ni extravagante. Con sus compañeros era uno más. Yo no era de los más cercanos a Diego. Con Marcos, con Clos, con Julio Alberto, con Migueli, por lo que fuera, tenía más empatía. Aún así, no era un divo. Estaba muy lejos de la imagen que luego se pudo vender.

Probablemente se equivocara. Pero cuando yo lo conocí, era en su mejor época. Era joven, se estaba dando a conocer y en el Barça fueron dos años muy buenos. Es muy triste que quede su imagen de fuera, de lo que hacía o deshacía, y no quede la imagen de su pierna zurda haciendo lo que hacía sobre el césped.

Tú como compañero le veías coger la pelota en el frontón donde hacíamos los rondos antes de salir al campo. Nunca hizo un calentamiento de equipo. Pero él lo hacía todo solo, sin atarse las botas, haciendo virguerías... Era increíble verle hasta en ese momento tan íntimo.

Le quité el 10, sí; pero porque no estaba él. Coincidió justo la época de su lesión y jugaba muchos partidos en su posición. Tú siempre te las ingenias para jugar con Diego. No podías decir que podías rendir como él, pero siempre buscabas tratar de amoldarte a su juego. Jugar con él fue todo un orgullo.

También es cierto que con Diego y con Schuster no acabamos de ganar La Liga, fue después cuando lo conseguimos. Sí que es verdad que ese plato fuerte de la Copa del Rey que ganamos, con la rivalidad Barça - Madrid y en Zaragoza fue especial. El gol de 'El Pichón' casi al final del partido... Fue lo más notable de esas dos temporadas de Maradona en Barcelona.

Con Diego, en mejores condiciones, el rendimiento colectivo habría sido mucho mejor. Habríamos ganado más sin lugar a dudas. Pero, si me tengo que quedar con un momento suyo en España, hay un partido en el Bernabéu donde hace un regate en el área haciendo que Juan José se comiera el palo. Estuvo brillante ese día.

En su segundo año estaba mucho más cómodo. La llegada de Menotti le cambió. No lo dijo nunca él, pero su relación era más estrecha. Tampoco tiene nada que ver la mentalidad de un técnico alemán con la de uno argentino que, además, le conocía perfectamente.

En cualquier caso, de toda la trayectoria te tienes que quedar con el Maradona que ganó el Mundial. La 'Mano de Dios', el gol contra Inglaterra, esa jugada en la que dribla desde el centro del campo... son los momentos más álgidos de Diego como futbolista. 

Yo creo que Leo Messi se puede comparar a ese Diego. Él era más individual, pero técnicamente era un 10. Messi se ha convertido más en jugador de equipo, pero en sus inicios era como Diego. Lo que pasa es que Messi no ha ganado un Mundial y eso en Argentina marca mucho. Es por lo que Maradona es Dios.

Me hubiera gustado decirle que solo se vive una vez. Darle las gracias por el fútbol que nos ha dado. Fue un honor inmenso haber coincidido con Diego en un vestuario. Mi primer gol en el Barça, Maradona me dio el balón casi en la misma línea para que marcase. Gracias Diego y hasta siempre.