Tadej Pogacar, ensangrentado mientras corre la Strade Bianche.

Tadej Pogacar, ensangrentado mientras corre la Strade Bianche. UAE TEAM

Ciclismo

Ni Van der Poel ni la lluvia: la otra gran preocupación de Tadej Pogacar en la París-Roubaix

El ciclista esloveno se enfrenta en el 'Infierno del Norte' a una 'maldición' sobre su bicicleta que dura ya un cuarto de siglo.

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Este domingo la París-Roubaix centra seguramente más miradas que nunca. El enfrentamiento directo entre Tadej Pogacar y Mathieu Van der Poel en los adoquines del 'Infierno del Norte' elevan esta carrera a otra dimensión y la convierten en uno de los acontecimientos deportivos del año.

La prueba se presenta como un apasionante duelo entre el neerlandés y el esloveno. El tercer mano a mano entre ambos en el tercer Monumento de la temporada. 

Hay un dato que 'preocupa' especialmente a Tadej Pogacar, una estadística que se puede convertir en la enésima barrera que derribe a base de talento el actual campeón del mundo. Y tiene que ver con su bicicleta Colnago.

El historial de la París-Roubaix dice que ninguna bicicleta de la marca Colnago ha ganado en los adoquines franceses desde hace ya 25 años. Un cuarto de siglo sin un triunfo de la firma italiana pese a que es una de las que más caché tienen en todo el mundo.

La última vez que una Colnago triunfó en el 'Infierno del Norte' fue cuando se estrenó este siglo. En el año 2000 el belga Johan Museeuw se llevó la victoria en el velódromo de Roubaix y cruzó en solitario la línea de meta. En aquella ocasión se impuso a su compatriota Peter Van Petegem y a Erik Zabel, que le acompañaron en el podio.

Una carrera con historia

Aquel éxito de Johan Musseuw fue una forma perfecta de reivindicarse en una carrera tan dura como la París-Roubaix. En su victoria del 2000 entró en meta señalándose su rodilla izquierda, esa misma que en la edición anterior estuvo a punto de perder después de una terrible caída en el tramo de Arenberg.

Musseuw es, además, uno de los ciclistas más laureados de esta durísima carrera. El belga cuenta con tres títulos en su palmarés. Ganó por primera vez en 1996, repitió en el 2000 y volvió a hacerlo en el 2002.

Todo un especialista en este terreno tan complicado, también fue segundo en la edición de 2001 y se subió al tercer cajón del podio en los años 1995 y 1997.

El desempate

Hasta ahora, las cuentas entre Mathieu Van der Poel y Tadej Pogacar están igualadas esta temporada. El neerlandés se llevó la victoria en la Milán-San Remo y el esloveno hizo lo propio en el Tour de Flandes. Por eso, este desempate cobra tanta importancia.

Se trata de una carrera marcada por el debut de Tadej Pogacar en la París-Roubaix. Nunca antes el actual campeón del mundo ha participado en esta prueba, pero sí que sabe lo que es correr por estos mismos adoquines franceses tanto en las categorías inferiores como en una etapa del Tour de Francia que transcurrió por estos mismos caminos.

Las previsiones de tiempo mejoraron con el paso de los días y la amenaza de lluvia ha ido desapareciendo. Sin duda, una gran noticia tanto para Pogacar como para el resto de los ciclistas, ya que el riesgo de caída será menor. 

Por lo tanto, Tadej Pogacar no sólo se enfrenta a Van der Poel y al resto de aspirantes como Wout Van Aert o Mads Pedersen, también tiene enfrente la estadística de esos 25 años sin el triunfo de una Colnago, la marca de bicicleta que él monta.