Tadej Pogacar con su maillot amarillo.

Tadej Pogacar con su maillot amarillo. REUTERS

Ciclismo TOUR DE FRANCIA

El enemigo nº 1 de Pogacar en el Tour es la Covid-19: el positivo de un compañero enciende las alarmas

Hay dos casos en el pelotón y uno dentro de su equipo. Mientras este sábado solo fue superado por Wout Van Aert. 'Matxin' muestra preocupación.

9 julio, 2022 21:34

"Todas las previsiones son pocas", recalcaba Josean Fernández 'Matxin' tras ver como este sábado Vegard Stake Laengen y su masajista tenían que abandonar el Tour de Francia tras el positivo del ciclista noruego. Después de dos victorias consecutivas, la última tras superar en un duelo impresionante a Jonas Vingegaard en la Super-Planche, ha llegado el primer problema para el capo Tadej Pogacar. Su respuesta ha sido la de casi ganar un esprint a Wout Van Aert.

Además de Laengen, Geoffrey Bouchard, del AG2R - Citroen, también es positivo y son los primeros corredores del Tour de Francia en retirarse de la carrera. Durante la etapa de este sábado que acababa en Lausana, Gianni Moscon abandonaba no solo por unas molestias en la rodilla, si no tal y como confirmaba su equipo, Astana Qazaqstan, por su Covid persistente. Lo contrajo en enero y entonces sufrió una grave bronquitis. Luego tuvo una primavera difícil y parece que en verano también le afecta.

"Duermen en habitaciones individuales todos los corredores, cada uno tiene un masajista diferente, no lo comparten, tenemos personal que incluso higieniza las habitaciones antes de entrar... Yo creo que todas las previsiones son pocas. Ayer, pese a que hizo una gran etapa, dio negativo. Esta mañana se sentía con dolor de garganta y pese a que habíamos hecho control ayer, se lo volvió a hacer y dio positivo. El masajista ha dado negativo dos veces, pero hemos decidido que se fuera también", explicó 'Matxin' en la SER.

Tadej Pogacar y Wout Van Aert en Lausana.

Tadej Pogacar y Wout Van Aert en Lausana. REUTERS

Pogacar sigue en forma. El esloveno consiguió más renta para defender su maillot amarillo en la primera gran etapa de montaña. Aprovechó la trampa de la subida hasta la villa olímpica de Lausana para imponer el ritmo del grupo y estar a punto de ganar por tercera vez consecutiva en este Tour. El premio fue una tercera posición que le otorga cuatro segundos más de diferencia. No parece tener rival más que el virus que parece correr por el pelotón.

El UAE de Pogacar impuso un fuerte ritmo en las empinadas rampas previas a la meta cerca de la zona olímpica. Pero el final suavizaba. Allí llegaron a rueda del esloveno tanto Michael Matthews como Van Aert. El del Jumbo está plantando cara al defensor del trono en estas primeras jornadas con su ciclismo agresivo, acusado incluso de perjudicar los intereses de su equipo. Este domingo ya será otra cosa. Jonas Vingegaard parece el único capaz de hacerle sombra. Deberá demostrarlo.

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Saliendo desde la comuna suiza de Aigle, los ciclistas recorrerán 192,9 kilómetros hasta llegar a Chatel les Portes du Soleil, ya de vuelta en Francia. Por delante tendrán cuatro puertos de montaña, una de cuarte categoría, otra de segunda y dos de primera. El pelotón deberá completar las subidas al Col des Mosses (13,3 kilómetros al 4,1%), al Col de la Croix (8,1 kilómetros al 7,6%) y el Pas de Morgins, de 15,4 kilómetros al 6,1% que coronarán a 10 kilómetros de la rampa final de Chatel. 

El hecho de que al día siguiente tengan un día para descansar y retomar con fuerzas la próxima semana parece animar a que haya fuegos artificiales. La sensación es que ningún equipo más que Jumbo puede moverse contra Pogacar.