El Real Madrid impone su ley de nuevo ante el Barça y se lleva el segundo Clásico de la Liga Endesa para reforzar el liderato

El Real Madrid ha culminado el pleno de victorias ante el Barcelona esta temporada. Los blancos se han alzado con el triunfo ante los azulgranas en la Supercopa de España, en la Euroliga y en la Liga Endesa. Los de Joan Peñarroya volvieron a revivir los viejos fantasmas cuando enfrente están los vigentes campeones de la ACB. [Así hemos vivido la victoria del Real Madrid]

Los de Chus Mateo se han convertido en la 'bestia negra' del Barça esta temporada. El Real Madrid ha asaltado el Palau Blaugrana en un partido cargado de tensión que no se decidió hasta el último segundo. El Clásico se decidió en un final extraño con dos libres fallados de Deck a falta de cinco segundos, rebote de Tavares, pérdida del Madrid y tiro final fuera de tiempo.

El Real Madrid encadena ya 14 victorias consecutivas en la Liga Endesa y es que desde la derrota el 22 de diciembre frente a Valencia Basket, los de Chus Mateo cuentan con triunfos en todos sus compromisos. Los blancos no sueltan el pie del acelerador y mientras las posiciones varían por detrás, ellos siguen manteniendo el liderato a pesar de no haber tenido regularidad en el juego durante gran parte de la temporada.

Los Clásicos siempre se deciden por pequeños detalles y en este encuentro no iba a ser menos. A falta de menos de un minuto para el final, el Barça ganaba 83-82, pero los triples de Sergio Llull -imperial durante el partido- y Dzanan Musa fueron determinantes para la victoria del Real Madrid.

Intentó el Barça darle la vuelta al marcador en lo que hubiese sido una remontada histórica, pero tras las canastas de Darío Brizuela y Kevin Punter, los azulgranas se quedaron en la orilla mientras el Real Madrid celebra ser el primer equipo clasificado del playoff de la Liga Endesa a falta de ocho jornadas.

Un Madrid de menos a más

Con la sorpresa en el quinteto inicial de Sergio Llull, el Real Madrid no tardó en estar acertado desde el perímetro. El balear junto a Campazzo sorprendieron a un Barça que encontró en Kevin Punter al jugador que liderase al equipo en ataque. El estadounidense quiso celebrar con una victoria su renovación e hizo méritos para ello, anotando 13 puntos en el primer tiempo.

Los blancos sufrieron la falta de acierto que tuvo Mario Hezonja durante los pocos minutos que estuvo sobre el parqué en el partido. El croata fue silbado en el regreso a la que fue su casa y sin su presencia en el campo, el Barça empezó a sacar ventaja con un parcial de 18-5 que maquilló Dzanan Musa al término del primer cuarto, 24-20.

En el segundo cuarto el Real Madrid reaccionó mediante la entrada de Serge Ibaka, Alberto Abalde y sobre todo de Andrés Feliz. El jugador dominicano fue clave para la remontada del conjunto blanco, a pesar de los intentos de Joan Peñarroya de frenarle.

En el Barça empezó a emerger la figura de Jabari Parker. El estadounidense estuvo desaparecido durante la primera parte y sus compañeros le echaron en falta, situación que aprovechó el Real Madrid por medio de Dzanan Musa y los blancos dieron la vuelta al marcador antes del descanso, 39-42.

Un Clásico de alta tensión

Tras el descanso ambos equipos comenzaron a intercambiarse canastas: en el Barça siguió apareciendo un desdibujado Parker, mientras que en el Real Madrid destacaban Tavares y Campazzo. En un partido de tú a tú, Satoransky ejecutó un mate espectacular que celebró con rabia y evitó que los blancos se escaparan en el partido.

Hubo una pequeña trifulca en el Palau que tuvo a Youssoupha Fall como protagonista. Un balón de Campazzo que sacó ilegalmente el jugador del Barça, y luego se produjo un pique entre el senegalés y Tavares, con Campazzo separando a ambos jugadores y Garuba algo nervioso contra el pívot del Barça.

Después de ponerse el Real Madrid nueve arriba, el Barça reaccionó por medio de Darío Brizuela. Además, la canasta de Justin Anderson empató el partido tras un parcial de 9-0 para los de Joan Peñarroya. Los de Chus Mateo reaccionaron por medio de Ibaka, Feliz y el triple de Dzanan Musa permitió irse con ventaja al último cuarto, 61-68.

El Real Madrid no pudo empezar de la peor forma el último cuarto con dos pérdidas que castigó el Barça con un 5-0 de salida. Ni un minuto había transcurrido cuando Chus Mateo ya tuvo que detener el partido. Sin ninguna intención de ceder, los jugadores azulgranas y los blancos empezaron a enchufar todas las canastas emergiendo Darío Brizuela en el equipo local y Andrés Feliz en el vigente campeón.

El base del Barça puso por delante a su equipo a falta de un minuto, pero Llull se sacó de la manga un triple que parecía que no iba a acabar entrando. No replicó el Barça y en un triple fallado por Garuba, Tavares se hizo con el rebote y Musa metió desde el perímetro para silenciar el Palau.

Joel Parra metió una canasta rápida a falta de 30 segundos para el final y a Andrés Feliz le tembló la mano en los tiros libres -metió uno de los dos que tuvo-. Con poca defensa Kevin Punter metió una nueva canasta y en la falta de Parra a Llull, el balear metió los dos tiros libres que resultaron definitivos para llevarse el partido a pesar de la canasta de Brizuela, 89-91.