Il Divo fue un antes y un después en la vida de Carlos Marín. Aunque el artista comenzó su carrera musical siendo un niño -a los ocho años ya había lanzado su primer álbum-, consiguió el éxito internacional después de que en 2004 debutara con el grupo de música, creado por el reconocido representante y productor Simon Cowell (62 años).

Junto a Urs Bühler (50), David Miller (48) y Sébastien Izambard (48), Carlos Marín no solo alcanzó la fama y grandes triunfos como cantante, sino también logró amasar una fortuna que, tras su muerte, ha quedado valorado en 20 millones de dólares (17.707,70 euros). La cifra ha sido la estimada por Celebrity Networth, el portal estadounidense especializado en los bienes de las celebridades. 

La mencionada web dedica la mayor parte de su análisis al trabajo que llevó a cabo Carlos Marín como vocalista de Il Divo. Así, recuerda que el grupo lanzó su primer álbum de estudio en 2004, poco después de su formación. En tiempo récord, aquella producción alcanzó el número uno en las listas musicales de Estados Unidos, Canadá, Australia y Países Bajos. Un año después salió a luz su segundo trabajo, Ancora, con un resultado muy similar. Consiguió la primera posición en Norteamérica, Reino Unido, Australia y Canadá. 

Il Divo en una imagen de archivo. Gtres

Siempre, su tercer disco, salió al mercado en 2006 y también consiguió grandes éxitos en la industria de la música. Lo mismo ocurrió dos años más tarde con The Promise y, tiempo después, con sus siguientes producciones: Wicked Game en 2011, A Musical Affair en 2013 y Amor & Pasión en 2015. En total, Il Divo logró vender más de 35 millones de álbumes en todo el mundo hasta mediados de 2015. Además, ha alcanzado importantes reconocimientos que los ha catapultado como referentes de la lírica. Fueron nombrados Artista de la Década en los Classic Brit Awards en 2011 y en 2006 establecieron un récord mundial Guinness como el grupo de crossover clásico de mayor éxito comercial en la historia. De hecho, se considera que instauraron un nuevo estilo musical, denominado pop operístico o pópera, que cautivó a destacados personajes. 

Carlos Marín y sus tres compañeros, además de actuar en un sinfín de shows programados en varias partes del mundo, se presentaron ante algunos líderes de la política que se mostraron como sus verdaderos fans. Il Divo cantó para Mijaíl Gorbachov (90), ex secretario general del Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética, y para muchos otros jefes de Estado. El 20 de enero de 2009 tuvieron un espectáculo en La Purple inauguration Ball -una condecoración a las Fuerzas Armadas- en Washington D. C. para el entonces mandatario de Estados Unidos, Barack Obama (60). Tres años más tarde, también mostraron su talento a la Familia Real británica cuando celebraron el Jubileo de Diamante de la reina Isabel II (95).

Carlos Marín en una imagen de 2018. Gtres

Pero en los últimos tiempos, Carlos Marín no solo trabajó como vocalista de Il Divo. El artista, que falleció el pasado 19 de diciembre en el centro médico Manchester Royal de Inglaterra después de que EL ESPAÑOL informara sobre su estado de gravedad, también se desempeñó como mánager. De hecho, era el propietario de Espectáculos Tercer Milenio, una sociedad dedicada a la representación de artistas. Según ha comprobado este periódico, el fallecido cantante sigue figurando como administrador único en una compañía de la que también forman parte su hermana y su exmujer. La primera, Rosa María Marín, tiene el cargo de apoderada. Mientras que la segunda, Geraldine Larrosa (43), figura como accionista. 

El vocalista de Il Divo también tenía participaciones en otras dos compañías relacionadas con la prestación de toda clase de servicios artísticos. Era socio y administrador único de Ópera Diamond SL. y administrador de Trapp Entertainment S.L.

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