Como capricho, como acompañante de otro dulce, solo, regando fruta, frío, caliente. La verdad es que no tengo claro ni creo que importe, para cuando o en qué situación vale esta sopa de chocolate blanco, solo puedo decir que esta riquísima y que siempre quieres un poco más. Un postre sencillo de hacer y que vale para casi cualquier cosa y darle vida a cualquier fruta o postre seco o soso que tengamos por ahí. Además, tiene propiedades afrodisíacas….comprobado.

Preparación

Preparar esta receta no nos va a llevar más de 10 minutos, lo primero es poner en el fuego la leche con la nata y la vaina de vainilla. Cuando alcance su punto de ebullición bajar el fuego y añadir la tableta de chocolate sin dejar de remover para que se mezclen bien todos los ingredientes.

Después apartamos la mezcla del fuego y la dejamos enfriar al menos una hora, pasada esta hora retiraremos la vaina de vainilla y batiremos la mezcla con el yogurt.

La sopa que nos ha quedado habrá que meterla en el frigo y dejarla como poco 4 horas.

Para terminar  picamos con un cuchillo unas cuantas almendras y las tostamos 5 minutos en una sartén hasta que estén doraditas. Servimos la sopa en copas o en un plato hondo y le añadimos las almendras por encima para decorar.

Consejos: podéis acompañar la sopa con cualquier cosa, en vez de almendras podéis rallar un poco de chocolate negro y añadirlo por encima, piñones o pequeños frutos rojos como arándanos o frambuesas.

Resultado

Después de fría suele quedarse una capa de chocolate encima, que  habrá que remover para volver a ligar con el resto de la salsa o sopa. Como decía al principio, es ideal para acompañar y revitalizar cualquier postre o dulce. Por supuesto también puede ser con chocolate con leche o negro. A disfrutarlo, pero sin pasarse que es adictivo.

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Tiempo: 10 min de cocción. 4 horas en el frigorífico

Dificultad: 1/5

Digestión: 2/5

Precio: 3 euros