Karlos Arguiñano.

Karlos Arguiñano. Cocina Abierta

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Karlos Arguiñano, rotundo sobre la mejor forma de cocer los garbanzos: "Olvídate del remojo, así quedan perfectos"

Arguiñano desvela en Antena 3 su truco para cocer garbanzos en pocos minutos y sin perder sabor. También recomienda usar los de bote.

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Karlos Arguiñano no solo cocina, también enseña. Y esta vez, lo ha vuelto a hacer. Durante la emisión de su programa en Antena 3, el cocinero más carismático de la televisión ha sorprendido con una receta que junta tradición, sabor del mar y rapidez: garbanzos con berberechos.

Pero más allá del plato, lo que ha llamado la atención ha sido su truco para cocer los garbanzos en tiempo récord. “No hace falta esperar horas ni dejarlos en remojo toda la noche. Si haces esto, los tienes listos en minutos”, aseguraba mientras removía la olla.

Su secreto: la olla exprés y un gesto previo

Arguiñano explicó que, para quienes no tienen tiempo de remojar los garbanzos durante 8 o 12 horas, existe una alternativa fácil: “Los pones en agua caliente con un poquito de bicarbonato durante una hora. Luego, los pasas directamente a la olla rápida y en 20 minutos están tiernos y perfectos”, decía, mientras añadía: “Y lo más importante: no se despellejan”.

Según el chef vasco, este método permite mantener la textura y el sabor de la legumbre, evitando que se deshaga. “Lo que no puedes hacer es cocerlos directamente sin nada, porque ahí sí que se te eterniza la receta”, advertía con su habitual humor.

Y para quienes quieren ir aún más rápido, Arguiñano no tiene prejuicios: “Los de bote también valen. Si están bien lavados y los cocinas con cariño, nadie nota la diferencia”. Con esta recomendación, el cocinero acerca aún más la cocina tradicional a quienes no tienen tiempo ni ganas de complicarse.

Los garbanzos con berberechos, su plato estrella del día

La receta, sencilla pero resultona, se basa en combinar los garbanzos ya cocidos con un sofrito de ajo, cebolla y pimiento verde, al que se añade un buen fumet y, finalmente, los berberechos al vapor. “Hay que abrirlos aparte para que no suelten arena en el guiso”, recordaba.

El resultado es un plato sabroso, marinero y con todo el sabor de la cocina de siempre, pero adaptado a la vida moderna. “Esto te lo comes hoy y estás comiendo sano, barato y con fundamento”, decía entre risas, fiel a su estilo.

"Hay que cocinar más y quejarse menos"

Durante el programa, Arguiñano aprovechó también para lanzar uno de sus habituales mensajes con moraleja. “La gente dice que no tiene tiempo para cocinar, pero bien que se tiran dos horas con el móvil. Cocinar es quererse un poco más, y con trucos como este, no hay excusas”, sentenciaba.

Una vez más, Karlos demuestra que la cocina tradicional puede ser rápida si se sabe cómo. Y como él dice: “No hay platos lentos, hay cocineros sin ganas”.