Representación gráfica de un tumor colorrectal.

Representación gráfica de un tumor colorrectal.

Salud

Estos son los cinco factores que favorecen la aparición de cáncer de colon en España: la alerta de los médicos

Aunque no podemos controlarlos todos, sí podemos modificar nuestro estilo y hábitos de vida para reducir su impacto negativo en la salud.

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Con más de 40.000 nuevos casos en España cada año, el cáncer colorrectal ocupa el primer puesto en el triste podio de los tumores. Una tónica que ocurre a nivel global, como demuestra que la Sociedad Estadounidense del Cáncer predijo recientemente que en 2025, en Estados Unidos habría alrededor de 155.000 nuevos casos de cáncer colorrectal y 52.900 muertes. Se trata, por tanto, de uno de los cánceres más comunes en todo el mundo

Tal como explica la Clínica Universidad de Navarra en su sitio web, el cáncer de colon se origina en el intestino grueso cuando se desarrollan pólipos en la mucosa. Algunos pueden degenerar en un tumor maligno que puede extenderse localmente o diseminarse a través del sistema linfático y sanguíneo, afectando el hígado, pulmón, huesos y cerebro. Sin embargo, si se detecta a tiempo, "es curable en más del 90% de los casos", por lo que es importante la detección precoz.

Evidentemente, al igual que ocurre en otras enfermedades, existen diferentes causas y factores de riesgo que pueden desembocar en ella. En este sentido, el Dr. Cedrek McFadden, cirujano colorrectal con sede en Carolina del Sur y asesor médico de la Alianza contra el Cáncer Colorrectal, expuso al medio estadounidense New York Post cinco de los principales factores que pueden aumentar el riesgo de padecer cáncer colorrectal.

Antecedentes familiares. "Si un pariente cercano ha tenido cáncer colorrectal, usted corre un mayor riesgo", señala McFadden. Tener un familiar de primer grado (un padre, un hermano o un hijo) con cáncer colorrectal puede aproximadamente duplicar el riesgo de desarrollar la enfermedad. Ciertas mutaciones genéticas heredadas de padres a hijos pueden aumentar significativamente el riesgo. El síndrome de Lynch, por ejemplo, es responsable del 3% al 5% de los cánceres de colon.

Edad avanzada. "Si bien el cáncer colorrectal puede aparecer a cualquier edad, el riesgo aumenta significativamente después de los 50, aunque ahora estamos viendo casos en personas más jóvenes con mayor frecuencia", señala McFadden. Más del 75% de los casos suceden en personas de 55 años en adelante. Sin embargo, la proporción de personas menores de esa edad, ha ido en aumento en los últimos años.

Dieta poco saludable. "Comer mucha carne roja o procesada puede aumentar el riesgo. Agregue más frutas, verduras y cereales integrales ricos en fibra a su plato", aconseja McFadden. Las carnes procesadas, como los fiambres, las salchichas, los hot dogs, el tocino, el pepperoni y el jamón, han sido saladas, curadas, ahumadas junto con los nitratos y nitritos añadidos pueden dañar las células que recubren el intestino.

En contraposición, este tipo de alimentos que poseen un bajo contenido en fibra, por su parte, un nutriente que es muy positivo para el colon, ya que alimenta las bacterias beneficiosas del intestino, ralentiza la digestión y promueve los movimientos intestinales regulares.

Estilo de vida poco saludable. "Fumar, consumir alcohol en exceso y llevar un estilo de vida sedentario pueden aumentar las probabilidades de desarrollar cáncer de colon", afirma McFadden. El sobrepeso o la obesidad también aumenta el riesgo de cáncer colorrectal porque el exceso de grasa corporal provoca una inflamación crónica que puede alterar el crecimiento celular normal.

Enfermedades inflamatorias del intestino y diabetes. "Las enfermedades inflamatorias del intestino, como la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa, aumentan el riesgo", afirma McFadden. Estas enfermedades provocan una inflamación persistente en los intestinos que puede causar cambios celulares que pueden volverse cancerosos. Las personas con diabetes tipo 2 también tienen un mayor riesgo de cáncer colorrectal porque los niveles altos de insulina pueden promover el crecimiento de células cancerosas.

Nuestros hábitos importan

Los factores de riesgo no siempre son controlables. Por supuesto, envejecer, tener antecedentes familiares o sufrir enfermedades como la diabetes es algo sobre lo que not tenemos demasiada capacidad de control. Pero en cuanto a los otros dos factores, sí podemos actuar para limitar su posible impacto

Según la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), la alimentación y el ejercicio juegan un papel clave en la prevención del cáncer colorrectal. El sedentarismo y una dieta poco equilibrada no solo son factores de riesgo directos, sino que también contribuyen a la obesidad, una condición estrechamente relacionada con el desarrollo de tumores.

El exceso de grasa corporal favorece la producción de hormonas como el estrógeno, genera inflamación crónica y eleva los niveles de insulina en sangre, creando un entorno propicio para el crecimiento celular descontrolado. Según la AECC, estas condiciones "pueden aumentar la probabilidad de aparición de un cáncer", especialmente en el colon y el recto.

Por el contrario, una dieta rica en fibra, frutas, verduras y cereales integrales puede reducir el riesgo de esta enfermedad, al mejorar el tránsito intestinal y favorecer una microbiota saludable. También se recomienda limitar el consumo de carnes procesadas y rojas, ya que contienen compuestos que pueden dañar las células intestinales y aumentar el riesgo de mutaciones malignas.

El ejercicio físico regular, además de ayudar a mantener un peso adecuado, tiene un efecto protector. La AECC señala que "la actividad física reduce la inflamación, mejora la sensibilidad a la insulina y contribuye a un mejor funcionamiento del sistema inmunológico", factores clave para prevenir el cáncer colorrectal y otras enfermedades.