Aiza, enfermera española de 33 años, en Suiza

Aiza, enfermera española de 33 años, en Suiza

Ciencia

Una enfermera española de 33 años, en Suiza: "Aquí gano 7.000 euros al mes y sin contar las horas extras o fines de semana"

Aixa se mudó a Suiza en julio de 2022, cansada de la inestabilidad del sector sanitario en España.

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Aixa, una joven de 33 años que estudió enfermería en la Universidad Autónoma de Madrid, encarna la historia de miles de profesionales sanitarios.

Tras ocho años trabajando en grandes hospitales públicos en Madrid, saltando de "contrato en contrato", su vocación se estaba "gastando".

Hoy, vive en Suiza, trabaja en el prestigioso Hospital Universitario de Zúrich y su sueldo mensual se sitúa entre 6.300 y 7.000 francos suizos (entre 6.951 y 7.486 euros), sin incluir extras por noches, festivos o fines de semana.

En España, Aixa se sentía "desbordada de estrés", llegando a trabajar al 100% en un hospital público y al 50% en uno privado, más trabajos freelance, todo para poder ahorrar.

Lo máximo que llegó a encadenar en dos años fueron seis meses de contrato, viviendo constantemente "a la espera del teléfono" con la inseguridad de ser penalizada si no aceptaba una guardia. Así, lo relata ella en una conversación con First Step Swiss.

Aixa describe a la enfermera española como una "enfermera de guerra" que "vale para todo", cubriendo neuro, cardio o digestivo.

Aunque afirma que la formación académica en España es sólida y la deja 100% preparada para trabajar en Suiza, lamenta la falta de especialización y el trato.

En Madrid, se acostumbró a la "frase maravillosa": "Es que yo te pago tu sueldo", y a un trato "más agresivo" por parte de los pacientes.

Cansada de la inestabilidad, Aixa se mudó a Suiza en julio de 2022 con el nivel de alemán "básico basiquísimo". Sabía que, para convalidar su título universitario, necesitaba el certificado B2 de alemán.

Para pagar el curso intensivo de alemán y sobrevivir, tuvo que buscar trabajos de baja cualificación. "Yo empecé como muy de lo bajo, o sea, incluso estuve lavando hasta platos", confiesa.

La sorpresa fue mayúscula para ella: incluso en esos puestos, llegó a ganar "casi 4.000 francos" más propinas, lo cual le permitía pagar su curso, su seguro médico y vivir bien.

Ser enfermero en Suiza

Una vez que aprobó el B2, el proceso de ascenso fue meteórico. Tras trabajar inicialmente como Assistentin (una posición entre enfermera y auxiliar), inmediatamente su empresa renegoció su sueldo y condiciones.

Cuando decidió volver al hospital, envió cinco currículums y, a la hora, ya tenía llamadas de departamentos para realizar días de prueba.

En el hospital suizo, el cambio de ambiente fue radical. Aixa disfruta de un "respeto absoluto" por parte de los pacientes, que la tratan de usted.

Además, el hospital paga y exige la especialización, incluyendo "muchísimos cursos" que se realizan durante el tiempo de trabajo.

@firststepswiss Suiza es una oportunidad que no se puede desaprovechar como enfermera. #suiza🇨🇭 #enfermeria #enfermera #emigrar ♬ sonido original - First Step Swiss

Otra gran diferencia es el sistema. El ciudadano suizo es "muy consciente de lo que cuesta el sistema sanitario", por lo que no va al hospital "a la ligera".

Además, todo el trabajo de la enfermera se registra: "Tú has acompañado al paciente al baño, clicas. Han sido 5 minutos. Clicas. Estos 5 minutos se cobran". Todo se factura, haciendo al personal más consciente de los recursos.

Aixa, concluye que, con el salario suizo, es posible vivir bien, ahorrar y viajar, permitiendo que el dinero deje de ser una preocupación.

Su consejo para otros profesionales sanitarios es claro: "Da el salto, lánzate, ven con toda y sobre todo con miedo, pero lánzate".