El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León revoca la condena de la Audiencia Provincial de Segovia de noviembre de 2021 a un hombre por un delito de lesiones graves, y acuerda su libre absolución. El alto tribunal considera que, a la vista del nuevo examen presentado en la apelación, existen serias y graves dudas acerca de lo que realmente ocurrió la madrugada de los hechos juzgados.

Los hechos se remontan a 2018, cuando ocurre la trifulca que lleva a juicio tanto a H., una de las partes de la pelea como a I., la otra parte acusada. En un primer momento se condena a H. como autor y responsable de un delito de lesiones, con una pena de dos años y seis meses de prisión, así como una indemnización total de 24.891 euros, de los cuales se establecen 16.630 por lesiones, 7.500 por secuelas y otros 761€ por gastos médicos.

Por su parte, H. presentó un recurso de apelación a la sentencia del Tribunal, alegando vulneraciones contra sus derechos, tales como que no hubiese una correcta valoración de las pruebas presentadas o que no se tuviera en cuenta la presunción de inocencia. También en este recurso, pidió la nulidad del juicio y sentencia anteriores, siendo valorada por otro tribunal dicha sentencia.

Asimismo, solicitó la reducción a dos años de prisión, que sólo se le condenara al 50% de las indemnizaciones iniciales y una condena a I., la otra parte, por prestar un escrito de acusación en su contra.

Los hechos del caso

En un primer relato de los hechos, que se remontan a 2018, se da por supuesto que el acusado, Humberto, se encontraba con algunos amigos y otro grupo cuando se produjo una de las discursiones que iniciaron la cadena de agresiones. Tras esta primera pelea, con una lesión en la ceja, se inició otra en el exterior del local en el que se encontraban en la que el entonces acusado, agrede con una copa rota a Imanol, causándole lesiones múltiples. Al parecer H. también sufrió un esguince de grado II en su rodilla izquierda.

El supuesto agredido, I., tenía multitud de heridas en su mano derecha, así como la sección de varios tendones. Debido a esto requirió curación, asistencia médica y tratamiento quirúrgico para suturar los tendones, lo que supone lesiones graves que a consecuencia le han causado perjuicio estético por deformidad y cicatrices, una recuperación de 358 días y secuelas sin limitación funcional.

Por otra parte, el tribunal decide que no se acepta el anterior relato, por lo que se consideran finalmente como hechos probados que la pelea fue entre las personas de ambos grupos, dejando lesiones en ambos implicados. Sin embargo, aunque se mantiene como hecho las lesiones entre ambos, se decreta que no es posible probar la forma ni el autor de las susodichas.