Blog del suscriptor

Comunismo tal cual (por cambiar de tema...)

Efe

Efe

  1. Blog del suscriptor
  2. Opinión

Es frecuente el disfraz con el que los comunistas se camuflan; el ‘comunismo’ en términos definitorios pasa a ser ‘eurocomunismo’, ‘neocomunismo’… A los que no aceptamos tal disfraz se nos suele llamar demagogos; pero, hablemos de ello tal cual, sin disfraces.

El comunismo es un sistema político, económico y social (también llamado ‘dictadura del proletariado’) basado en una doctrina que defiende la prohibición de otros partidos políticos, de la propiedad privada, de la diferencia de clases, y en la que los medios de producción están en manos del Estado, quien distribuye los bienes de manera equitativa y según las necesidades, siguiendo el criterio de los que ostentan el poder (los miembros de un Partido Comunista único).

En el comunismo, el individuo que trabaja bien (y asciende), estudia (y opta a un mejor empleo), ahorra (e invierte en crear su propia empresa) o es creativo (tiene grandes ideas y las desarrolla –Bill Gates, Steve Jobs, Amancio Ortega, etc.-) y por tanto prospera, es anulado a través de impuestos y la prohibición de iniciativas y de la propiedad privada. El individuo que es vago (no trabaja o trabaja mal), no lucha por su futuro (no estudia), no ahorra (prefiere gastarlo en bares, fútbol, burdeles, viajes…) o no es creativo (torpe, vulgar, sin ideas) y por todo ello no prospera, es remunerado de forma similar al primero, a través de la redistribución que hace el Estado.

Así, se aniquila la motivación en el pueblo, que es llevado a la ruina y miseria, unificando –a la baja (o muy baja)- su nivel de vida. Solamente los individuos (y su entorno) en la cúpula del Partido Comunista ostentan un nivel de vida superior. El fracaso de un sistema que tanto daña al pueblo tiene evidencias probadas: la ex URSS (y sus satélites), Cuba, Venezuela, Corea del Norte, etc.; países donde no nos gustaría vivir… No hay ni un solo país en el mundo, cuyo ejemplo avale su éxito… y donde nos gustaría vivir.

El comunismo no es un sistema democrático, ya que no admite la existencia de otros partidos políticos excepto su Partido Comunista, no admite la libertad de expresión y manifestación del pueblo, no admite la propiedad privada y no admite la libertad del individuo para desplazarse (fronteras cerradas para no huir).

Bueno, pues políticos así, comunistas radicales declarados, como Iglesias, Garzón, Montero, etc., los tenemos incrustados en nuestro gobierno democrático. ¿Qué fines turbios pretenden?

Disfraces fuera y un poco de reflexión, por favor.