Un rico zumo de naranja.

Un rico zumo de naranja.

Nutrición

Adiós al zumo de naranja: el innovador cítrico en España con más vitamina C y rico en calcio

Es una fruta muy demandada para la elaboración de aceites esenciales a los que se le atribuyen interesantes propiedades.

18 mayo, 2024 15:14

La bergamota, conocida científicamente como Citrus bergamia Risso, es una fruta cítrica que ha cautivado los sentidos y los paladares durante siglos. Con su distintivo sabor amargo y aroma embriagador, la bergamota es un híbrido entre el limón y la naranja amarga, con una temporada de cosecha relativamente corta, desde principios de diciembre hasta enero. Este período limitado de recolección agrega un elemento de exclusividad a esta fruta cítrica, cuya esencia es altamente valorada en diversas industrias.

La zona de cultivo es casi exclusivamente el sur de Italia, con un énfasis particular en la región de Calabria. De hecho, es aquí donde se concentra más del 90% de la producción mundial de esta cítrico, gracias a las condiciones climáticas y geográficas únicas que favorecen el cultivo de este híbrido.

El nombre ‘bergamota’ se remonta al turco bey armudu, que se traduce como 'pera del Señor'. Este nombre revela la majestuosidad y la distinción que rodean a este fruto único. La planta de bergamota es un árbol de porte elegante, que alcanza alturas de 3 a 4 metros, con hojas ovaladas de un verde claro y flores blancas que se agrupan en racimos. Sus frutos, de forma globosa y colores que van desde el verde al amarillo, son el verdadero tesoro de la bergamota.  

El uso de la bergamota en la alimentación se remonta al menos a abril de 1536, como se evidencia en el menú al emperador Carlos V durante su paso por Roma, cortesía del cardenal Lorenzo Campeggi. Hoy, su presencia se expande a la cocina, donde su sabor distintivo aromatiza desde bebidas gaseosas hasta la clásica mermelada de bergamota. Además, es el ingrediente esencial en el famoso té Earl Grey, donde su amargor se combina magistralmente con la suavidad del té negro.

Beergamota

Beergamota PxHere

Anticolesterol y antioxidantes

Los valores nutricionales de la bergamota por cada 100 gramos son los siguientes: 42,7 calorías, 11,7 g de carbohidratos, 2,2 g de fibra, 9,5 g de glucosa, 1,1 g de proteína, 40 mg de vitamina A, 80 g de vitamina C y 38,9 g de calcio. Pero destaca, sobre todo, por su alta concentración de diversos flavonoides, como la hesperidina y la naringenina.  Estudios recientes han revelado que la bergamota puede tener un impacto significativo en los niveles de colesterol, lo que la convierte en un elemento valioso en la prevención de enfermedades cardiovasculares.

Con su contenido, diversos estudios han demostrado que la bergamota puede ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL (colesterol 'malo') en aproximadamente un 25%, mientras que simultáneamente aumenta los niveles de colesterol HDL (colesterol 'bueno'). Este equilibrio en los niveles de colesterol es crucial para mantener la salud cardiovascular, ya que el exceso de colesterol LDL puede conducir a la acumulación de placa en las arterias, aumentando el riesgo de enfermedades cardíacas.

Además de sus efectos sobre el colesterol, la bergamota también ha destacado por sus propiedades antioxidantes, que ayudan a proteger las paredes internas de las arterias contra el daño oxidativo, y por su acción antiinflamatoria natural, que puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo, otro factor de riesgo importante para enfermedades cardiovasculares.

El aceite esencial

El aceite esencial de bergamota, obtenido mediante la prensa en frío de la cáscara de los frutos, es el corazón de este cítrico. Ampliamente utilizado en la industria de la perfumería y la cosmética, el aceite de bergamota es un aliado en el cuidado de la piel y el cabello, gracias a su acción antibacteriana y astringente. Diluido en gel de aloe vera o incluido en productos cosméticos, ayuda a controlar la producción excesiva de sebo, combatiendo el acné y mejorando el aspecto general de la piel.

Rico en antioxidantes y vitaminas, como la vitamina A, el aceite de bergamota se utiliza en la elaboración de cremas antiedad y tratamientos contra la celulitis. Además, sus propiedades desinfectantes lo hacen útil en la limpieza de heridas superficiales y su capacidad para combatir la halitosis lo convierte en un aliado para la higiene bucal.

Al aceite de bergamota también se le atribuyen propiedades relacionadas con el sistema nervioso, especialmente en situaciones de estrés. Según un ensayo clínico, su aroma demostró su capacidad para fomentar el bienestar en tan solo 15 minutos de exposición. Este aroma tiene la capacidad de inducir sentimientos positivos y generar una sensación general de bienestar, lo que lo convierte en una herramienta valiosa para promover la salud mental y combatir la depresión.

El peligro de ciertas sustancias

A pesar de los múltiples beneficios de este cítrico, su uso no ha estado exento de polémicas. En el pasado, los extractos de aceite de bergamota se utilizaron en Italia para elaborar aceleradores de bronceado y protectores solares, gracias a la presencia de sustancias llamadas psoralenos. Estos compuestos, una vez que penetran en la piel, pueden aumentar el daño al ADN, favoreciendo no solo la producción de melanina, sino también arriesgando causar fitofotodermatitis, una reacción que oscurece la piel y la hace más sensible a los rayos UV.

Es importante destacar que los psoralenos han sido clasificados como cancerígenos desde 1959. Sin embargo, fue solo después de 1995, especialmente en los Estados Unidos, que fueron prohibidos en los protectores solares, después de numerosos casos de melanomas malignos con resultados fatales. En consecuencia, hoy en día, los psoralenos se utilizan solo en el ámbito terapéutico, como en la terapia PUVA, para tratar algunas patologías específicas.