El homenaje a Hulk Hogan se convirtió en un escándalo cuando un manifestante interrumpió a gritos a Ron DeSantis.

El homenaje a Hulk Hogan se convirtió en un escándalo cuando un manifestante interrumpió a gritos a Ron DeSantis. Europa Press

Estados Unidos

Un manifestante furioso atacó a Ron DeSantis en pleno discurso: "¿Ese es tu maldito legado, Alligator Alcatraz?”

El gobernador de Florida intentó rendirle tributo a Hulk Hogan, pero terminó enfrentando duras acusaciones sobre su legado político.

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Carlos Dileo
Publicada

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, vivió un momento tenso durante un acto público en la ciudad de Bradenton, cuando un manifestante interrumpió su discurso con duras acusaciones y gritos cargados de ira. El político republicano se encontraba recordando al famoso luchador Hulk Hogan, fallecido horas antes, cuando un hombre del público lo increpó en voz alta, señalando su responsabilidad sobre el centro de detención conocido como “Alligator Alcatraz”.

Un homenaje que terminó en escándalo

DeSantis ofrecía unas palabras en memoria del luchador Hulk Hogan, ícono de la cultura pop en las décadas de los 80 y 90, cuando fue interrumpido abruptamente. “Era un superhéroe para muchos niños en Florida”, dijo el gobernador antes de que el manifestante lo interpelara a los gritos con duras frases: “¿Ese es tu maldito legado? ¡Te arrodillas ante un pedófilo!”.

El homenaje a Hogan, quien falleció a los 71 años en su casa de Clearwater a causa de un paro cardíaco, fue eclipsado por la inesperada irrupción del manifestante. Hogan, cuyo nombre real era Terry Gene Bollea, había aparecido el año pasado en la Convención Nacional Republicana, respaldando la candidatura presidencial de Donald Trump.

"Alligator Alcatraz": el foco del reclamo

El grito del manifestante no fue casual. “Alligator Alcatraz”, como se conoce al centro de detención de inmigrantes ubicado en los Everglades, se convirtió en símbolo de una de las políticas más cuestionadas de la Administración de DeSantis. Las denuncias contra la instalación incluyen maltrato a detenidos, opacidad financiera, contratos millonarios para aliados políticos y daños ecológicos al frágil ecosistema del parque nacional.

La construcción de este centro generó protestas por parte de organizaciones defensoras de los derechos humanos y de comunidades originarias, como los Miccosukee y los Seminole, que acusan al gobierno de ignorar sus sitios ceremoniales y territorios tribales en la zona.

El momento más tenso del acto

“¡Detente, detente!”, alcanzó a decir DeSantis señalando al hombre entre el público. Sin embargo, el manifestante continuó con sus acusaciones, vinculando tanto al gobernador como al presidente de Estados Unidos con calificativos extremos, antes de ser retirado por el personal de seguridad. Mientras lo sacaban del lugar, lanzó un último grito: “¡Malditos nazis!”.

Pese a la interrupción, DeSantis retomó su discurso sin ofrecer mayores comentarios sobre el incidente. El momento fue registrado por varios asistentes y circuló rápidamente en redes sociales, generando reacciones tanto de apoyo como de rechazo hacia el gobernador.

El incidente ocurre en un contexto de creciente tensión política en Florida, donde las decisiones del actual gobierno polarizaron a la ciudadanía. La figura de DeSantis continúa generando adhesiones firmes entre sus simpatizantes, pero también fuertes cuestionamientos por parte de sectores críticos de su gestión, especialmente en temas migratorios y medioambientales.