La peor esterilla para hacer deporte, según la OCU: que no te engañen, que no es barata

El yoga es una práctica que conecta el cuerpo, la respiración y la mente. Es una de las actividades de relajación en la que ya confían muchos españoles y, para practicarla solo necesitas una esterilla. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) que ya ha comparado otros artículos como los colchones o las almohadas, ha hecho un análisis de doce modelos y marcas de este producto que se venden en el mercado. Ha valorado así, las diferentes propiedades y características que tiene que tener una buena esterilla y ha seleccionado la peor para ayudar a los consumidores en sus compras. 

Una buena esterilla para practicar yoga, según el organismo, debe ser cómoda, duradera y, sobre todo, que no resbale. El tamaño y el peso que tengan también son importantes. Es decir, no se debe comprar ni demasiado corta ni demasiado ligera porque puede tener peor adherencia al suelo mientras estás realizando las posturas. Además, debe pesar poco porque así será más fácil de transportar de un sitio a otro. 

La esterilla también debe tener una buena amortiguación y haber sido fabricada con materiales de alta calidad que proporcionen la comodidad para evitar los dolores en las extremidades. Pero, lo más importante es que no resbale porque, si se da el caso, podría truncar todos los ejercicios relajantes y no serviría para nada. Aunque, la mayoría de esterillas que ha valorado la OCU han recibido buenas puntuaciones, la peor valorada ha sido la de marca Manduka proLite con 34 puntos sobre 100 en el informe. 

Manduka ProLite

Esta esterilla se considera la peor porque contiene HAP (Hidrocarburos Aromáticos Policíclicos) que pueden ser dañinos para el organismo al inhalarlos y tiene altos niveles de Naftaleno, que es un posible agente cancerígeno. Cabe destacar que esta esterilla es técnicamente de las mejores del análisis. De hecho, ha recibido en casi todas las características 4 o 5 estrellas, pero ha sido muy penalizada por el alto porcentaje de productos químicos que contiene. 

Además, no es precisamente barata: se puede comprar en el mercado por precios que rondan desde los 72 hasta los 94 euros. 

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