Adrián Díaz, empresario español en China durante una entrevista.

Adrián Díaz, empresario español en China durante una entrevista. YouTube

Sociedad

Adrián Díaz, empresario español en China: "Allí los padres esclavizan a sus hijos con extraescolares de 6 horas"

Su sistema educativo, extremadamente competitivo, insta a los padres a exigir a sus hijos un esfuerzo titánico para convertirse en el número 1 de la clase.

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La imagen que nos hemos construido de la sociedad china es que son personas extremadamente trabajadoras, con una disciplina férrea y que no se dejan llevar por los vicios occidentales ligados a la búsqueda del placer.

Esto es la teoría, pero para bajarla a la práctica es muy interesante tener en cuenta el testimonio de Adrián Díaz, un empresario español que lleva 19 años viviendo en el gigante asiático y que se ha convertido en una voz autorizada para diseccionar las particularidades del país del dragón.

En un vídeo publicado en su cuenta de YouTube, el empresario ha revelado que "los padres de los niños chinos esclavizan a sus hijos con extraescolares de cuatro, cinco o seis horas", exhibiendo de este modo un afán sin límites por convertirlos en personas con una capacidad que va más allá de la media.

"Tienen que ser superdotados"

Adrián añade que en China, cuando un niño chino sale del colegio "no se va a jugar al parque, no se va a pintar grafitis en las paredes o no se va a fumar porros con sus amigos. Sale de la clase y se va a hacer piano, taekwondo, inglés, francés o cualquier cosa que se nos ocurra porque ese niño tiene que ser superdotado".

¿El motivo? La educación en este país "es lo más competitivo que existe". De hecho, destaca que el Gobierno chino incluso ha intentado minimizar y regular estas prácticas de los padres.

A modo de ejemplo, el empresario ha explicado que las escuelas siguen una jerarquía del número uno al tres y los alumnos pueden ir a un colegio u otro en función de sus capacidades. "Si tu hijo va a la escuela tres es que es un mal estudiante". Y agrega que dentro de las propias clases también hay una clasificación entre los estudiantes.

"Si tu niño es el 37, lo único que le pides a tu hijo es que suba en ese ranking y que sea el número uno, no que apruebe las asignaturas. Pero esa persona sólo puede ser una; no es como en las evaluaciones de España donde todo el mundo puede sacar excelentes", apostilla el consultor de negocio.

Productor de ingenieros, científicos y matemáticos

Por lo tanto, aunque se suele vincular al gigante asiático con el comunismo y a Estados Unidos con el capitalismo, Adrián destaca que en China hay un capitalismo salvaje representado en la competitividad de los padres. Cuenta que "cuando el asiático llega a su casa en Estados Unidos, le dice a su padre que ha sacado un 8 sobre 10 y este le responde con que qué vas a hacer para mejorar esa nota".

Pero, ¿esta exigencia se traduce en profesionales mejor preparados en el futuro? El país liderado por el autócrata Xi Jinping es el principal productor mundial de graduados en ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas, además de acumular el 50% de los principales investigadores de inteligencia artificial.