Hombre mayor revisando las facturas de su casa.
Mauricio, jubilado: "Con la pensión mínima no encuentro casa y no sé a dónde ir, acabaré viviendo en la calle"
Las pensiones mínimas de muchos jubilados son cada vez más incompatibles con el aumento de los precios del alquiler en España.
Más información: Con pensiones mínimas, cada vez son más los jubilados que no pueden asumir los precios del alquiler en España.
El aumento en el precio de la vivienda es un problema compartido en buena parte de Europa, una subida en los precios de venta y alquileres que está castigando especialmente a España, con un incremento que supera ya la media comunitaria. Según los datos más recientes publicados por Eurostat, el pasado año finalizaba en nuestro país con un encarecimiento de las viviendas a nivel nacional del 11,4% con respecto a 2023. Un panorama preocupante que afecta a los más jóvenes, pero también a los mayores de 65 años, muchos de los cuales dependen de pensiones bajas para sobrevivir en un mercado cada vez más inaccesible.
Y es que, aunque en España los mayores de 65 años acumulan el 62% de las viviendas en propiedad, según recoge la 36ª edición del Informe Económico y Financiero de Esade, también existe una minoría del 9% de los hogares en alquiler en España que tienen una media superior a los 65 años. Un porcentaje que va en aumento, evidencia de ello es que los adultos nacidos entre 1980 y 1990 apenas alcanzan el 36% de las viviendas en propiedad. Esto ha provocado que las generaciones más jóvenes estén empujadas hacia el alquiler y que, con el tiempo, cuando lleguen a la jubilación, no dispongan de una vivienda en propiedad que les garantice estabilidad.
Precisamente esto es lo que recientemente le ha ocurrido a un jubilado de la zona de Tovo San Giacomo, al noroeste de Italia, que se ha hecho viral por contar su caso real. Su nombre es Maurizio Folicaldi y este pensionista asegura que se encuentra en una situación de emergencia habitacional debido a la venta del piso en el que vive actualmente. Una situación que le obliga a dejar su casa sin tener una alternativa: "No encuentro una casa, no sé a dónde ir, ayúdenme", declara Maurizio al medio local IVG. "No puedo quedarme en la calle porque no encuentro otro sitio donde ir", explica en una carta al citado medio.
Una situación aún más complicada sobre todo por la pensión mínima que recibe. Esa es una de las razones por las que busca un estudio económico con un alquiler de entre 350 y 380 euros al mes, una suma que sí le permitiría cubrir los gastos. "Les pido que difundan la noticia para que alguien pueda ayudarme", agrega Folicaldi.
La situación vivida por Maurizio Folicaldi pone de manifiesto una realidad que afecta a un número creciente de jubilados en distintos países europeos. Aunque su caso ha tenido lugar en Italia, presenta similitudes con el contexto habitacional de muchos pensionistas en España, especialmente en grandes ciudades donde el precio medio del alquiler supera los 800 euros mensuales. Esto se suma a que 1 de cada 2 de los pensionistas en España cobra menos de 1.000 euros al mes de pensión y muchos de ellos, por debajo de los 850 euros mensuales, una cantidad que puede resultar insuficiente para cubrir los gastos esenciales en ausencia de una vivienda en propiedad.