Dos grupos de personas hablando en la calle.

Dos grupos de personas hablando en la calle. EUROPA PRESS

Sociedad

Esta es la ciudad de España más charlatana: un estudio calcula los lugares donde más se habla

La plataforma de idiomas Preply ha analizado 20 sitios del país y ha expuesto una lista con un cálculo sobre la interacción entre sus habitantes. 

17 noviembre, 2023 14:04

Aceptémoslo: si hay algo por lo que se caracteriza España no es el silencio. En cualquier colección de tópicos se escucharán nombres de su gastronomía, algún artista internacional o esa costumbre de hablar a un volumen más fuerte de lo habitual. Son tópicos, pero tienen algo de poso. Y dentro de nuestra propia geografía también se distingue esta idiosincrasia: la costa bullanguera, el Madrid estresante, la Galicia sometida a la lluvia...

Hasta ahora, incluso hay estereotipos con la gente de distintos territorios. Dentro de Andalucía, por ejemplo, se habla de una mayor tranquilidad en Córdoba. Cuna de tres culturas -la árabe, de la judía y la cristiana- se ha considerado como más plácida que el resto de capitales de provincias. Y, sin embargo, no lo es tanto. Al contrario: según desvela un curioso estudio sobre la habilidad social de conversar y hablar que ha difundido este lunes por Preply, una plataforma online de aprendizaje de idiomas.

Su objetivo ha sido averiguar si los españoles son o no muy habladores y en qué zonas tienden más a la charla. Y Córdoba es la ciudad española donde más se habla. Esa es la conclusión después de que la compañía entrevistara el pasado mes de octubre a 2.035 residentes de las 20 ciudades más pobladas de toda España. Después expone los resultados sobre diferencias regionales, de edad y momentos favoritos para expresarnos.

Como dato previo a esta especificación, según inciden en Preply, más de la mitad de la población española se considera habladora (55%) y las mujeres (57%), se perciben ligeramente más habladoras que los hombres (52%). Ayudan el clima, el estilo de vida o el concepto de amistad. Esos factores condicionan el grado de conversación habitual de los residentes de una determinada región, según señalan desde la empresa. Las diferencias entre el norte y sur, el modo de ser de los habitantes de algunas comunidades autónomas o la diferencia entre el sentido de comunidad de pueblos y ciudades son algunas de las variables para evaluar a "los más habladores de España".

De esta forma, Córdoba, Granada y Palma de Mallorca son las tres ciudades más habladoras del país, con una puntuación media en la lista de Preply de 6.80, 6.70 y 6.60 puntos, respectivamente. En la parte opuesta, San Sebastián, Santa Cruz de Tenerife o Barcelona: estas son las ciudades menos habladoras, según los datos del estudio de la plataforma idiomática. En total, estas ciudades han tenido una puntuación media de 6.26, 6.22 y 6.17.

¿Desde qué siglo se considera el español un idioma?

Las notas de quién habla más y las circunstancias en las que lo hacen se calcularon aplicando una escala de valoración del 1 al 10 a cada una de las respuestas recopiladas. Después se hizo una media con los datos obtenidos para cada uno de los ítems y, a través del sumatorio de puntuaciones medias, se imprimió el valor total para cada ciudad y situación concreta.

Cuestión de edad

Tal y como anotan en otro apartado, los españoles hablan con una media de 6 personas al día por ocio o gusto (exceptuando el trabajo y otras gestiones). La diferencia por género es mínima a la hora del gusto por charlar. Las mujeres obtienen una puntuación de 6,49 frente a 6,48 de los hombres. El estudio distingue por tramos de edad y vierte que son los ciudadanos de la Generación X (45-54 años y los de 35 y 44 años) los que más ejercitan este hábito, mientras que la Generación Z es más retraída a hablar en público (6,35).

Metiéndose en los puntos más detallados, charlar con amigos y familia para comentar las noticias o series de moda se sitúa en los más alto de la clasificación, por encima de "dar todo tipo de información detallada si alguien me pregunta en la calle". En tercer lugar se encuentra "hablar con los camareros de los bares que frecuento", por delante de la clásica conversación de ascensor con los vecinos. Un ranquin que se cierra, en el número cinco, con platicar con repartidores y dependientes de tiendas. En el apartado animal se gana fuerza: hablar con nuestros semejantes mientras se pasen los perros es común.