El instituto Carolina Coronado, el centro de enseñanza donde supuestamente se cometieron las agresiones.

El instituto Carolina Coronado, el centro de enseñanza donde supuestamente se cometieron las agresiones. Facebook

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Los 10 días de infierno del chico de 16 años de Badajoz agredido sexualmente por "una manada" en el instituto: "Casi lo matan"

Fuentes del caso sostienen que uno de los profesores era conocedor del caso y que "no hizo nada"; el chico evitaba a toda costa ir a clase: "Me duele la tripa".

Más información: Denuncian a cuatro menores por la "agresión física y sexual" a un compañero de colegio en Almendralejo

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Jimena, nombre ficticio, recibe una llamada de teléfono por parte del centro de estudios de su hijo. La conversación entre los responsables del colegio, situado en Almendralejo, en la provincia de Badajoz, y la madre de un joven estudiante de 16 años cae como un jarro de agua fría. Los docentes le relataron que su hijo había sufrido agresiones físicas y sexuales.

Según ha podido saber EL ESPAÑOL, los presuntos abusos se produjeron durante diez interminables días, entre el 17 y 27 de marzo, un periodo que marcará la vida del adolescente. El damnificado fue supuestamente agredido, tanto en el terreno físico como sexual, por parte de cuatro compañeros de estudios de su misma clase, del instituto Carolina Colorado de la citada localidad.

La Asociación Acoso Escolar de la Provincia de Cáceres (Acoes) subraya a este periódico el calvario que ha sufrido -y continúa sufriendo- la madre del joven supuestamente agredido. "Le llamaron diciendo que si podía acudir de forma inmediata al instituto porque su hijo ha sufrido una agresión física y sexual. A ella le rechina que su hijo esté en el mismo aula que sus presuntos agresores", apunta Maribel Verdugo, portavoz de la asociación cacereña. El joven "estaba lleno de golpes". Esto no es un juego, lo han podido matar, han hecho barrabasadas, ha sido como una manada, eran cuatro y no había un líder como tal, eran todos a la vez".

Los menores son imputables al tener 16 años, un hecho que Verdugo celebra: "Tiene que caer todo el peso de la ley sobre ellos". Siguiendo en esta línea, la portavoz de Acoes elogia que Jimena se haya atrevido a denunciar: "La madre fue muy valiente. Alguien, que desconozco quién fue, le dijo que no denunciase, pero ella por suerte no hizo caso y lo fue a denunciar".

Tal y como han confirmado fuentes del caso a este diario, los menores presuntamente implicados en las agresiones sexuales fueron expulsados del centro de estudios durante un mes. Por su parte, el principal damnificado ha optado por no acudir a las clases. "Desde la asociación nos preguntamos qué va a pasar cuando pase este mes. El niño no va al instituto porque tiene que procesar todo lo que ha sucedido en esos diez días. Es un suceso muy grave", agregan desde Acoes.

La denuncia surgió cuando "la madre nos habla a través de un familiar y nos lo cuenta. Intentamos que se tranquilice y desde la asociación le ofrecimos todo el equipo de psicólogos y resto de recursos para que ni a ella ni al niño les falte de nada", mantiene Verdugo.

"Un profesor lo sabía y no hizo nada"

Dado el impacto mayúsculo que tendrán estos hechos en la víctima y en su entorno, las reacciones de la madre fueron las siguientes: "Me volví loca. Me fui calle abajo chillando". Al adolescente de 16 años, teniendo en cuenta las heridas que presentó, fue derivado al Hospital Tierra de Barros, ubicado en el término municipal de Almendralejo,

Según ha podido conocer EL ESPAÑOL, el chico espetó frases como "me duele un diente", "me duele la barriga", "no puedo ir a clase", con el objetivo de no volver a clase y sufrir el viacrucis que padecía a diario. "Sabía lo que le esperaba todos los días en el instituto", comentan fuentes del caso. En este sentido, las mismas fuentes revelan que el caso lo conoció un profesor pero "no hizo nada": "Le notó raro al niño y le preguntó que qué le pasaba y el niño le dice que le pegan". "¿Por qué no hizo nada? Pregúntale, entérate de qué le pasa. Si tú lo has notado es que le pasa algo grave y ya no ha podido aguantar más", exclaman ante su asombro estas fuentes.

La portavoz de Acoes indica que los presuntos agresores "también son víctimas":"Hay que trabajar para que esos niños no vuelvan a cometer un acto como ese". "Yo creo que si tú estás educando en unos valores y empatía y tienes una buena educación no haces esto", apostilla Mendoza de forma rotunda. "No los llamemos centros educativos. La educación se recibe en casa, son más bien centros de enseñanza", sostiene Mendoza.

Fuentes policiales aseguran a este periódico que la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Comisaría de Policía Nacional de Almendralejo se ha hecho cargo de la investigación del caso. Según apunta el diario Hoy, los menores implicados en la agresión tuvieron problemas en otros centros de estudios por los que pasaron con anterioridad y que la víctima ya había sido previamente víctima de bullying.

Se desconoce si las agresiones se produjeron en los vestuarios del centro educativo o en un recinto diferente, dado que el instituto, según informan fuentes del caso, cuenta con videovigilancia.