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Macabro crimen en Ohio: los Wagner mataron a 8 miembros de una familia por la custodia de una hija

Según los fiscales del estado norteamericano de Ohio, la familia Wagner llevó a cabo el asesinato múltiple de varios miembros de la familia Rhoden.

2 agosto, 2022 01:27

Con la lealtad familiar por bandera y llevándola al extremo, como suele ser habitual en el estado de Ohio, pueden surgir problemas entre diferentes familias que desemboquen en finales trágicos. "La familia se mantiene unida, es el código de las colinas", afirma a The Washington Post, Mike Allen, abogado defensor penal con sede en Cincinnati encargado de supervisar uno de los casos más conocidos y rocambolescos del estado en los últimos tiempos.

Para conocer al detalle el caso de las familias Wagner y Rhoden hay que retroceder al 22 de abril de 2016, cuando ocho miembros de la segunda de las familias fueron asesinados por los Wagner, que tras más de seis años se enfrentan a penas de muerte. 

Christopher “Chris” Rhoden Sr, de 40 años; la ex esposa de Chris Rhoden, Dana Manley Rhoden, de 37 años; sus hijos Clarence “Frankie” Rhoden, Hanna May Rhoden y Christopher “Chris” Rhoden Jr, de 20, 19 y 16; la prometida de Frankie, Hannah Hazel Gilley, de 20 años; el hermano de Christopher Sr, Kenneth Rhoden, de 44 años y su primo Gary Rhoden, de 38 fueron los ocho miembros asesinados con disparos en la cabeza mientras que se encontraban durmiendo en tres remolques y una casa al sur de Columbus.

Arrestados

Arrestados

El motivo por el que se cree que los Wagner llevaron a cabo este múltiple asesinato fue para hacerse con la custodia de forma exclusiva de una hija compartida. Finalmente, George Wagner IV, de 30 años, George “Billy” Wagner III, de 51 años, Ángela Wagner, de 51 años y Edward “Jake” Wagner, de 29 años, fueron arrestados en el mes de noviembre de 2018 y fueron acusados de una amplia cantidad de cargos que pasa del homicidio agravado a la conspiración o el encubrimiento.

Más delitos

La fiscal especial Angela Canepa se ha encargado de identificar a la familia Wagner como un grupo muy sólido y consolidado que realizan todas las actividades y toman todas las decisiones juntos, incluida la de asesinar a los Rhoden. Según informa la propia Canepa, además los Wagner también cometieron tiempo antes otro tipo de delitos como incendios provocados, tráfico de drogas y robos.

La fiscal también afirma que cada miembro tenía su papel a desempeñar en un plan ideado varios meses antes con el objetivo de que no fallara la idea de conseguir la custodia de la hija de Jake Wagner y Hanna Rhoden. Por ejemplo, Angela Wagner se encargó de hacerse con unos zapatos deportivos en Walmart para que sus hijos los usaran la noche de los asesinatos, o George Wagner fue quien compró el camión que sólo se emplearía la noche del crimen.

Después de las detenciones, el caso no ha hecho más que seguir dando giros inesperados, como el que se produjo al romper Jake Wagner el silencio declarándose culpable de los 23 cargos y accediendo a testificar contra los miembros de su familia. A pesar de este movimiento de Jake, los demás miembros de la familia Wagner se mantuvieron firmes en su postura de no admitir su culpabilidad e implicación.

El joven de los Wagner admitió haber matado a cinco de las ocho personas asesinadas, corroborando también las pruebas de los investigadores. Su condena será de ocho cadenas perpetuas sin posibilidad de libertad condicional. Por otra parte, a Angela Wagner se le retiraron los cargos de asesinato y su condena final pasó a ser de 30 años de prisión.

A pesar de esto, los otros dos acusados, George Wagner y su padre, Billy Wagner, continúan declarándose como inocentes, algo que de momento no se espera que pueda cambiar. Sin embargo, el juicio de George empieza el 29 de agosto, y uno de sus abogados, John Patrick Parker, insiste en que George no debía haber sido acusado de homicidio agravado. “George no disparó ni mató a nadie. No apretó el gatillo ni una sola vez”, afirmó Parker durante una audiencia.

Hay que destacar que la ley vigente del estado de Ohio indica que que alguien involucrado en una conspiración para cometer un asesinato es tan culpable como la persona que lo comete. Los abogados de George ponen su foco en evitar que sea juzgado de esa forma. "No puede ser condenado por lo que otros miembros de su familia hayan hecho o testificado”, afirman los abogados.

En definitiva, a esta historia todavía le pueden quedar nuevos capítulos, ya que, además, los miembros del jurado plantean la posibilidad de visitar la propiedad donde ocurrieron los homicidios, que se encuentra bajo custodia policial para poder extraer aún más detalles sobre un caso que aún podría tener algún giro inesperado más.