El Español
Treintayseis
Actualidad
|
Galicia

Vecinos de Santiago vuelven a quejarse por los comportamientos incívicos de los peregrinos

Miles de jóvenes católicos recorrieron las calles cantando a gritos e invadiendo las carreteras
Peregrinación multitudinaria recorriendo Santiago
@rubencela
Peregrinación multitudinaria recorriendo Santiago

Santiago de Compostela lleva recibiendo peregrinos de todas partes del mundo desde hace siglos, pero este año Xacobeo es diferente. Con más de 50.000 Compostelas entregadas en julio, y una previsión de un crecimiento cada vez más fuerte de caminantes, la ciudad está soportando un nivel de entradas que a algunos vecinos se les está haciendo cada vez más difícil de asumir.

La reciente Peregrinación Europea de la Juventud, en la que participan más de 12.000 jóvenes de fuera y dentro de España, se ha vuelto la última en la lista de las quejas de los compostelanos.

A pesar de los intentos de algunos vecinos, como los del barrio de San Pedro, que recientemente sacaron un decálogo con recomendaciones para los caminantes entre las que se incluían peticiones como que no gritaran o que recogieran la basura, muchos de ellos han hecho oídos sordos y continúan con su actitud.

"No decimos que no venga la gente", señala Ana Gayoso, vecina del barrio, "pero que se sepan comportar". Gayoso es conciente de que San Pedro es la entrada más popular para los peregrinos, pero señala que los comportamiento incívicos cada vez son más y más frecuentes. "En San Pedro no se puede pasar con la bicicleta a toda velocidad, por ejemplo, y es algo que pasa todos los días. Eso se tendría que saber".

"Pedimos que haya más control policial, porque aquí vive gente muy mayor. Cualquiera te dirá que esto lleva pasando muchos años pero sí que este año, hay más grupos multitudinarios que vienen cantando y gritando desde temprano por la mañana", señala Gayoso.

El pasado lunes, tras la Junta de Gobierno, el alcalde Xosé Sánchez Bugallo quiso referirse a estos malestares pidiendo a los vecinos un "esfuerzo de acogimiento", a la vez que admitía que la gran afluencia de visitantes podía causar molestias o hacerlos sentir "un poco agobiados". El regidor señaló que al día la capital gallega está recibiendo unos 3.000 peregrinos, la mitad que pasan por el barrio de San Pedro. "Les pedimos el mejor comportamiento posible, resaltó.

Sin embargo, acoger se hace cada vez más difícil sobre todo cuando, como ocurrió ayer, grandes grupos de caminantes invaden calles que no se encuentran dentro del itinerario del Camino de Santiago. Ocurrió en el barrio de Galeras, una zona residencial fuera del recinto amurallado del casco histórico. Las calles de esta zona se vieron colapsadas por un grupo multitudinario que cantaba a gritos mientras recorría la carretera.

La asociación vecinal Plataforma de Galeras se ha pronunciado al respecto, culpando a los jóvenes peregrinos de ir "berrando, ocupando todolos espazos públicos de Santiago, impidan a convivenza, o sosego e a vida ordinaria en Compostela".

Algunos usuarios decidieron evidenciar lo que viven los vecinos subiendo vídeos de la situación a las redes sociales.

Los problemas con los peregrinos no paran ahí. Ayer una usuaria de Twitter colgó unas fotografías de unos caballos atados a la verja de la iglesia de Santa María de Salomé, en la Rúa Nova. El templo está detro del casco histórico y está protegido como patrimonio de la humanidad. El párroco de la iglesia asegura que él no tiene problema con estas actuaciones, pero que de todas formas el responsable último es el Ayuntamiento, y que son ellos los que deberían aclararlo.

Actualidad