El Español
Quincemil
Vivir
|
Escapadas

Oia, una escapada diferente en el Baixo Miño

La gastronomía, la cultura, el arte y el turismo verde protagonizan los planes que se pueden llevar a cabo en este pequeño municipio de la provincia de Pontevedra
Monasterio de Santa María de Oia.
Concello de Oia
Monasterio de Santa María de Oia.
Ofrecido por:

La provincia de Pontevedra alberga muchos lugares estupendos entre los que escoger a la hora de organizar una escapada. Apostar por el turismo de cercanía, y explorar las ciudades y pueblos que esconde nuestro territorio, es una alternativa realmente recomendable, puesto que, no hace falta ir muy lejos para encontrar pequeños rincones que merece la pena visitar.

Al sur de la provincia, sobre los montes de Serra da Groba, se encuentra Oia, un municipio costero con poco más de 3.000 habitantes pero con un interesante patrimonio cultural y natural por conocer. Historia, arqueología, arte, turismo verde, gastronomía... Las opciones de actividades para realizar, senderos que recorrer o enclaves privilegiados que disfrutar abundan en Oia.

Patrimonio cultural y turismo verde

Si por algo destaca el municipio de Oia es por su gran patrimonio cultural. En el territorio se encuentran elementos de gran valor arqueológico, histórico y artístico y, la presencia de asentamientos humanos desde hace miles de años se confirma con los restos prehistóricos, vestigios romanos y castrenses que allí se pueden encontrar. Por algo se conoce a la franja litoral de Oia como "A Costa dos Castros".

Atravesando las cuatro parroquias del municipio -Mougás, Viladesuso, Pedornes y Santa María de Oia- transcurre la conocida como Ruta Máxica, un itinerario que une los diversos elementos de interés arqueológico, natural y etnográfico de la zona. El recorrido completo abarca 18 kilómetros a lo largo de la costa, y uno podrá encontrarse a su paso algunos petroglifos como A Cabeciña, A Pousadela, A Pedreira o el grabado de Auga dos Cebros, junto con restos de asentamientos castrenses como Cano dos Mouros.

Petroglifos de A Pedreira, situados en un mirador natural.

Otro de los elementos vertebradores del municipio, y visita indispensable, es el Monasterio de Santa María de Oia, declarado bien de interés cultural en 1931. Como señala el propio Concello de Oia, "la historia del Monasterio de Santa María de Oia es un relato bien documentado que cuenta historias de privilegios reales, ataques y expulsiones; pero que también habla de épocas de esplendor y heroicas acciones de defensa".

Se trata de uno de los pocos ejemplos de edificios religiosos frente al mar que quedan en Galicia, puesto que su situación provocaba que fuesen blanco de saqueos y ataques. Su fundación data del siglo XII, por lo que ha vivido gran parte de la historia del municipio y, además de como templo religioso, el monasterio ejerció como baluarte defensivo en incontables ocasiones.

Monasterio de Santa María de Oia.

El broche de la visita a Oia lo pone su espectacular patrimonio natural. El paisaje de montaña del interior contrasta con las zonas de costa rocosas, otorgando una gran variedad paisajística al territorio y ofreciendo a habitantes y turistas infinidad de opciones de maravillosos enclaves que visitar.

Pasear por el entorno de la pequeña parroquia verde de Mougás, o por la Senda del Pozo do Arco, en la parroquia de Burgueira, o disfrutar de la sombra que ofrecen las sobreiras do Faro, junto al río Broi, son algunas de las alternativas que ofrece el municipio de Oia.

Un recorrido por los murales del municipio

Mientras uno va recorriendo Oia, puede ir visitando los murales realizados por el reconocido artista venezolano, Flix. Un proyecto colaboración entre el Concello de Oia, el Proyecto Ewa y el propio Flix Robótico, junto con el patrocinio de la empresa gallega Pinturas Proa, que concluyó con 6 coloridas obras de arte. Desde el colectivo Proyecto Ewa consideran esta acción artística una pequeña obra viva, "que ha conseguido posicionar al municipio en el mapa del arte urbano nacional".

Los murales están localizados en distintos emplazamientos del municipio: bajo el puente de la carretera general, junto al acceso al Monasterio; en el colegio público de Oia, sobre sus muros exteriores e interiores; en las gradas del campo de futbol y en Torroña, junto a casa Paco.

Para apreciar este proyecto en profundidad, existe la posibilidad de realizar una ruta guiada por estas interesantes obras, de la mano del guía Borja Concheiro, que cuenta con amplios conocimientos en arte urbano.

Una parada gastronómica en A Casa da Henriqueta

Para coronar la visita a Oia, comer en uno de sus tantos restaurantes y bares es una opción muy recomendable. La oferta es muy variada, pero uno de los mejor valorados es A Casa da Henriqueta, un restaurante de comida tradicional gallega situado junto al Monasterio de Oia.

Un agradable establecimiento, con paredes de piedra y una enorme terraza con vistas al Monasterio. Carnes gallegas, pescado de la ría y el mejor marisco fresco, todo acompañado de una amplia carta de vinos; perfecto para terminar el día con un muy buen sabor de boca.

A Casa da Henriqueta, en la calle Vicente López.
Vivir