La incertidumbre acerca de cómo se vehicularán los fondos europeos para la recuperación de la economía española sobrevoló ayer varias de las intervenciones de los ponentes invitados a la tercera jornada del foro económico 'Wake up, Spain!' organizado por EL ESPAÑOL, Invertia y D+I. 

Con una diferencia esencial.

Mientras las autonomías, por boca de presidentes como Alberto Núñez Feijóo (Galicia), Ximo Puig (Comunidad Valenciana), Alfonso Fernández Mañueco (Castilla y León), Guillermo Fernández Vara (Extremadura), Fernando López Miras (Murcia) y Emiliano García-Page (Castilla-La Mancha) se expresaron con cautela, sabedoras de que una parte importante de los fondos se vehiculará a través de ellas, los municipios manifestaron su alarma al sentirse excluidos de ese proceso de reparto.

Esa fue, por ejemplo, la postura del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que rechazó que los ayuntamientos se conviertan en "la hermana pobre de la Administración". Almeida ofreció "lealtad institucional" al Gobierno de Pedro Sánchez, pero con una condición: las administraciones locales deben conocer su "porcentaje de participación" en esa gestión.

Ese fue también el caso de los tres alcaldes del PP y los tres socialistas que afirmaron, con distintos niveles de vehemencia, carecer de información acerca de la cuantía que podría llegar a sus manos finalmente y del papel que tendrán los ayuntamientos en su reparto.

"Los ayuntamientos podemos ser administraciones muy capaces de colaborar en conseguir el correcto y completo aprovechamiento de los fondos europeos" dijo Francisco de la Torre (PP), alcalde de Málaga.

"Es legítimo que los ayuntamientos aspiremos a un porcentaje importante de los fondos, siempre y cuando nuestros proyectos se correspondan con lo que marca la UE" afirmó Juan Espadas, el alcalde socialista de Sevilla. 

El consenso, en este sentido, fue absoluto. A él se sumaron Jorge Azcón (PP), alcalde de Zaragoza; Gema Igual (PSOE), alcaldesa de Santander; Óscar Puente (PSOE), alcalde de Valladolid; y Pablo Hermoso de Mendoza (PP), alcalde de Logroño. 

Optimismo con cautela

Mayor optimismo, aunque entreverado con enormes dosis de cautela, mostraron los presidentes autonómicos invitados a 'Wake up, Spain!'. Y no porque las regiones dispongan de más información de la que disponen los ayuntamientos, sino porque los fondos se vehicularán, en parte, a través de las autonomías

Y de ahí que las regiones hayan presentado más proyectos y por cuantías mucho mayores de las que se prevé que se vayan a conceder finalmente. Ese es el caso de Ximo Puig, que ha presentado proyectos por valor de 12.000 millones de euros, 8.000 de los cuales corresponden a la iniciativa privada.

Se trata, en el caso valenciano, de proyectos relacionados con la industria manufacturera, el turismo, la agricultura y la llamada nueva economía

Alfonso Fernández Mañueco informó de que ha pedido para su comunidad 5.000 millones de euros, divididos en dos partes. La mitad, 2.500, procedente "de los Presupuestos Generales del Estado". Y la otra mitad, "por otras vías".

El presidente de la Junta de Castilla y León se mostró también en contra de la anunciada armonización fiscal que pretende el Gobierno: "La armonización está bien si es para bajar los impuestos de manera equitativa, pero no como eufemismo para subir los impuestos".

Puntos fuertes autonómicos

Guillermo Fernández Vara y el popular Fernando López Miras aprovecharon sus intervenciones para poner en valor los puntos fuertes de sus comunidades. Por ejemplo, respecto a la anunciada futura fábrica de baterías, esencial para la digitalización de la economía española.

Vara destacó la condición de fabricante de litio de Extremadura, mientras López Miras optó por posicionarse como referente del sector agroalimentario y de la futura agricultura inteligente.

Emiliano García-Page, por su lado, pidió que el trabajo bien hecho (por ejemplo con las carreteras, las depuradoras o la Alta Velocidad) no lleve a España a quedarse en una peligrosa zona de confort.

"Hay que echarle más creatividad, hay que pensar que lo que se haga tiene que valer para adaptarnos a las coordenadas europeas, porque hay un acuerdo global en Europa sobre las coordenadas de crecimiento, tanto en investigación, en ciencia, como en sostenibilidad", dijo.

Los presidentes de Galicia y de Andalucía pusieron una nota de prudencia. "Antes de desenchufar lo que funciona conviene tener enchufado lo nuevo" dijo Alberto Núñez Feijóo, en referencia a la transición verde.

Juanma Moreno destacó su voluntad de acercar y agilizar la relación del ciudadano con las administraciones de su región: "Para ello tenemos que hacer mucha pedagogía con la sociedad y con los funcionarios".

Pero si por algo destacó la tercera y penúltima jornada de 'Wake up, Spain!' fue por la sintonía que mostraron presidentes y alcaldes de los dos principales partidos españoles en torno a dos ideas básicas.

La de que los fondos europeos pueden ser una herramienta de enorme potencial para reactivar la economía española y hacerla avanzar hasta el futuro, pero también la de que deben ser gestionados con cautela, con transparencia y, sobre todo, con inteligencia.

Porque de lo que se trata aquí no es de "tapar agujeros", como algún invitado señaló irónicamente, sino de subir una, dos o tres marchas el motor de la economía española.